Sa Sínia. El nuevo planeamiento prevé la urbanización del tramo final de la calle - Archivo

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El pleno de Sant Lluís aprobará mañana de forma provisional la adaptación de las Normas Subsidiarias (NNSS) del municipio al PTI, lo que representa que el suelo rústico protegido pase del 16 al 41 por ciento de la superficie total, según ha informado el teniente de alcalde de Urbanismo, Remigio Lora. La modificación del planeamiento urbanístico del municipio se llevará a cabo después de haber desestimado 49 de las 104 alegaciones recibidas, al culminarse la modificación en una fase referida a los núcleos tradicionales y caseríos y otra a las zonas turísticas.

La modificación del planeamiento urbanístico de Sant Lluís para su adaptación al PTI, en el ámbito de los núcleos tradicionales y caseríos, ha tenido 64 alegaciones, de las que 29 han sido estimadas, ocho de ellas parcialmente, y 35 han sido rechazadas. La mayoría de las alegaciones desestimadas se refieren a la ampliación del suelo urbano en los caseríos, al solicitarse esta calificación para parcelas en suelo rústico situadas junto a otras construidas. La modificación urbanística ha incorporado los planes especiales del caserío de Binifadet y de la zona rural de Ses Cases Velles, en el caserío de Es Pou Nou, para preservar la tipología arquitectónica de las dos zonas.

El nuevo planeamiento municipal contempla seis bolsas de aparcamiento en el ámbito del casco urbano de Sant Lluís. Tres son de nueva construcción: frente el 'casat' de Lloc d'en Caules, en la entrada del pueblo, que se ha reducido de 13.800 a 3.300 plazas; en el inicio del camino de Santa Rosita, junto a la calle de Son Parroquet; y en el extremo sur de la calle de Sa Sínia. Los tres aparcamientos restantes, ya construidos, están frente al nuevo colegio, la Plaça de ses Micoles y junto al cementerio municipal. Además, se ha eliminado la previsión de aparcamiento en el ámbito del caserío de Es Consell y, por otra parte, la antigua batería de costa F-9 de Biniancolla queda clasificada como parcela rústica y deberá elaborarse un plan especial para su urbanización, restringida al uso turístico, entre otros, y nunca residencial.

Por otra parte, la modificación de las NNSS en las zonas turísticas ha generado la presentación de 40 alegaciones, con 26 alegaciones estimadas, siete de ellas de forma parcial, y 14 desestimadas. Una de las consecuencias de la medida es la desclasificación de suelo urbanizable en las urbanizaciones de Cap d'en Font, Playa de Binissafúller, Binibèquer Nou y Biniancollet. Asimismo, un equipamiento previsto en Binissafúller, entre el Rincó Fondo y el Caló d'en Fust, se convierte en zona verde, mientras que el núcleo residencial de Alcalfar incrementa el suelo urbano en su zona septentrional.