Jaqueline Galvis Merchán - M.P.

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Autoficha
Me llamo Jaqueline y el pasado 22 de abril cumplí 40 años. Tengo tres hijos, el mayor tiene 23 años y se llama Jonathan, el segundo tiene 18 y se llama Roberto Carlos y la pequeña tiene cinco años y es Nashly Juliana. Mi hijo mayor me hizo abuela el pasado 11 de abril. Me dedico a cantar, aunque hoy mismo empiezo también a trabajar en una gasolinera. Mi gran afición es el canto, es mi vida.

¿Cómo es que una colombiana recala en Menorca?

Yo llegué a España estando Colombia en una situación muy difícil. Aterricé al Aeropuerto de Madrid desorientada, sin saber a dónde ir, a dónde dirigirme, qué hacer, qué día era. Conocí a una chica en el aeropuerto y de hablar nos hicimos amigas. Después de un tiempo, conocí a un señor que me ofreció trabajo hasta que, un día, se enamoró de mí. Era natural de Colombia aunque había residido en España toda su vida. Siempre me decía que un día me llevaría a un lugar que era el paraíso. Estaba hablando de Menorca.
Cuando me trajo aquí nos quedamos a vivir. Pero la dicha me duró muy poco porque mi amor se murió en un accidente, tan sólo un año después de trasladarnos.

¿Y qué ocurrió después?

Conocí a Juan, que ha sido un apoyo para mí en cada uno de los pasos que he dado. Me dio mucha fuerza cuando mi pareja murió y siempre ha estado a mi lado. Sin comerlo ni beberlo, pasamos de la amistad a ser matrimonio. Y ahora solo somos amigos, muy buenos amigos. Trabajamos juntos. Intentamos llevarnos muy bien por el bien de nuestra hija, sin mezclar trabajo con vida personal.

Es de todos conocido que tiene una voz espléndida. ¿Cuándo surge el amor por la música?

Desde que tengo uso de razón. Mi madre me enseñaba canciones y me acuerdo que me ponía delante del espejo y me veía como una artista. Siempre ganaba los concursos de la escuela de canto. Además, tengo muchísimas fotografías de mi juventud que dejan claro el paso de los años y en casi todas salgo con un micro en la mano. No tengo conocimientos de música, cuanto sé lo he aprendido de oído y gracias a la ayuda de Juan, que no tiene precio todo lo que ha hecho por mí. Es un gran profesional y vale muchísimo.

Quien cierra los ojos y le escucha cantar, oye a una voz menorquina, su acento es perfecto.

¿Ha sido muy complicado aprender canciones en menorquín?

Cuando me escuchan cantar la gente se da la vuelta y me pregunta de dónde soy, porque no parezco menorquina. Luego están atentos por si me equivoco. ¡Y eso que no sé escribir en menorquín!

Un deseo...

Llegar a grabar un cd.

¿Y una canción favorita?

"La historia de un amor". Cuando la canto me sale del alma. Es un bolero que me recuerda a mi pareja que ya no está entre nosotros.