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El Servei de Ports de les Illes Balears ha concedido al Club Nàutic Ciutadella otros tres años de gestión de los amarres de Cala en Busquets. La firma de la concesión se oficializó hace un mes y será vigente hasta el 2014.

La entidad gestiona la dársena deportiva del puerto de Ciutadella desde el 22 de junio de 2007, a través de una concesión que se ha ido renovando y prorrogando desde entonces. Se trata de una adjudicación temporal, a la espera de la reordenación definitiva de Cala en Busquets, tal como anunció Ports en su día. La entidad pagaba hasta la fecha alrededor de 1.800 euros al mes al Govern balear por la concesión.

El Club Nàutic de Ciutadella gestiona 90 amarres en la dársena, de los cuales 75 son de base y 15 de tránsito.

La seguridad que otorga ahora la firma de la concesión por tres años ha llevado al CNC a acometer una serie de mejoras en la dársena en beneficio de los usuarios. Según fuentes del club, una de las prioridades era mejorar el acceso hasta los pantalanes. Los propietarios de embarcaciones debían acceder hasta su amarre por un sendero que pasaba cerca de un chalet particular, por la zona del antiguo restaurante Las Terrazas. Para acondicionar un acceso alternativo, más directo y cómodo, el club ha impulsado un nuevo proyecto. La maquinaria empezó a trabajar antes de las vacaciones de Semana Santa para habilitar un camino peatonal más seguro directamente desde la carretera de Sa Farola. El acceso para los usuarios de la dársena continuará siendo a pie, por lo que se mantendrá la zona de aparcamiento contigua a la carretera. El importante desnivel existente ha obligado el uso de maquinaria pesada, con la consiguiente destrucción de un tramo de las antiguas terrazas que contenían la franja de tierra trasera a la dársena.

Por otro lado, el club ha retirado los 15 pantalanes flotantes que presentaban un avanzado estado de deterioro. Los soportes basculantes han sido sustituidos por un nuevo sistema de amarres. Asimismo se han colocado pasarelas para el tránsito peatonal, que incluso bordean el interior del espigón. Con la actuación, el CNC confía en dejar en condiciones el acceso y las instalaciones de la dársena de cara a la temporada turística, con el objetivo de que la inversión revierta en durabilidad y comodidad para los usuarios.

Mientras tanto, la entidad está a la espera de la próxima entrada en funcionamiento del dique. La salida de las navieras que operan en el puerto de Ciutadella en la actualidad permitirá que el club recupere los amarres del Moll de la Trona.