Del sector de la consultoría, en Accenture, a la multinacional Pepsi pasando por la cosmética y el glamour de L'Oréal para incorporarse después a otro gigante, Coca-Cola. La chispa de la vida de una directiva, Blanca Gómez (Guadalajara, 1964), madre de tres hijos y que afirma que sí, que se puede, ser mujer y escalar puestos de responsabilidad en la empresa privada, aunque con una política decidida de conciliación laboral y familiar.
Directora de Recursos Humanos de Coca-Cola para España y Portugal, afirmó ayer, momentos antes de participar en una de las conferencias programadas en la feria InnovEm, que si acaso deja un legado a su paso por la compañía norteamericana, a la que se incorporó hace siete años, serán precisamente las políticas de conciliación, "te lo dirían mis empleados". Para el sistema de Coca-Cola en España trabajan unas 6.000 personas, 250 empleados directos en la compañía y el resto en embotelladoras, una definición que incluye tanto plantas como fuerzas de venta y distribución.
¿Cómo se controla una red de esas dimensiones?
El trabajo es absolutamente trepidante, muy diferente cada día, hay mucho de solución de problemas, pero yo no diría que controlar es la palabra, porque no lo puedes llevar únicamente desde un departamento. Tienes que estar constantemente delegando en los managers, en las personas, en la gente que tiene equipo, ellos tienen que hacer muchas de las funciones de recursos humanos, yo no puedo ser la única que pueda motivar, orientar o formar. Alrededor del 40 por ciento de los empleados de Coca Cola tiene personas a su cargo.
De la cosmética a las bebidas gaseosas ¿fue un gran cambio?
Aunque venía de otra compañía de gran consumo, sí, noté un cambio enorme. Era la misma función pero muy diferente por la cultura de empresa de cada uno de los dos grupos. L'Oréal es una empresa francesa, muy política, donde tienes que estar pendiente del cómo además del qué, mientras que en la empresa americana -aunque aquí somos muy españoles-, es completamente distinto. Aquí todo se centra más en lo que quieres conseguir, en resultados y objetivos, somos muy directos y muy claros.
¿Qué es lo que ha cambiado en la gestión de recursos humanos en los últimos años?
Lo que más ha cambiado tiene mucho que ver con la búsqueda de la eficacia y la productividad, a través de la subcontratación y la tecnología. Que es fenomenal, pero yo digo que no tienes que pasarte con ese tipo de medidas. Al final nunca tienes que olvidarte de que estás hablando de personas, y tienes que tener una sensibilidad para saber que estás tratando con ellas y debes cuidarlas.
¿Y qué es lo que debe permanecer como hasta ahora?
Los valores. En Coca-Cola los empleados están muy formados para conocer el negocio, nuestro sector, nuestros competidores, y las características de cada producto. Esto es algo necesario y no tiene que cambiar, por mucho que se subcontrate, tienes que conocer bien el negocio, tan bien como otras personas que estén más próximas al mercado, como los que realizan ventas. Y eso es extrapolable a cualquier empresa, se puede aplicar en Coca-Cola o en la tintorería de la esquina. Tienes que tener gente a la que le gusta lo que hace, la pasión hacia aquello a lo que te dedicas es uno de los valores que no debe cambiar.
¿Cómo se mantiene esa motivación de los empleados en los actuales tiempos de crisis?
Es el día a día. Nosotros tenemos el compromiso de tomar las medidas que hagan falta para no prescindir de nadie. Es algo que llevamos intentando desde que empezó la crisis. Es un gran esfuerzo para recortar cosas que nos parecen más superfluas y mantener la plantilla, porque eso es algo que les va a fidelizar enormemente. Aunque entiendo que no todas las empresas pueden hacerlo, pero si tienes la capacidad, tus colaboradores tienen que saber que vas a contar con ellos siempre que puedas, que estén tranquilos, y seguir haciendo las cosas que hacías para motivar a la gente, como la flexibilidad y la conciliación. No hay que perder la coherencia y hay que ser más claro que nunca, y compartir información si hay que cambiar algo.
¿Qué beneficios reportará ese esfuerzo a las empresas?
Es un tópico pero es muy caro encontrar y formar a la gente. Si tienes opción, desde luego, hay que intentar aguantar y conservar a tu gente, porque además es cuando más la necesitas. En esta jornada alguien de la audiencia preguntaba si es el momento de innovar, por supuesto que es el momento, sobre todo para salir entre todos de esto, y estar preparados para cuando acabe la crisis, con el fin de hacer cosas nuevas antes que los demás, por eso necesitas a tu gente más que nunca.
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