Factoría. Los empleados se incorporan hoy al trabajo después de una semana de vacaciones forzosas - Javier

Factoría. Los empleados se incorporan hoy al trabajo después de una semana de vacaciones forzosas - Javier

A. M. O./ E. P.Maó16/03/11 0:00
TW
0

El Govern ha prometido a los productores que sirven cuajada a Quesería Menorquina que si el juez declara el esperado concurso de acreedores de la empresa, el Ejecutivo autonómico se hará cargo de los pagos durante tres meses hasta que la situación se normalice y abonará los pagarés que les adeuda la familia Ruiz Mateos, según explicó ayer el presidente de AGRAME, Guillermo de Olives. Las deudas, que oscilan entre 40.000 y 200.000 euros por "lloc" suman en total cerca de 850.000 euros y ante las promesas del gobierno autonómico, propietarios y payeses continúan entregando la cuajada después de amenazar la semana pasada con retirarse.

De momento, Nueva Rumasa sigue sin mover ficha y la esperada suspensión de pagos y el consiguiente nombramiento de una administrador judicial no llega. La situación económica de muchos empleados comienza a ser desesperante, según explicó ayer el presidente del comité de empresa, Antonio Olives. "Estamos en total indefensión", aseveró al tiempo que recordó que los operarios deben incorporarse hoy a trabajar sabiendo que tampoco cobrarán la paga de marzo.

Las alimentarias suman 150 millones de deuda
Las principales empresas alimentarias y bodegueras de Nueva Rumasa, entre las que figuran Dhul, Clesa, Elgorriaga, Trapa, Quesería Menorquina (Tranchettes) y Carcesa (Fruco y Apis), suman deudas hipotecarias cercanas a los 150 millones de euros, según fuentes financieras. En concreto, las instalaciones de la empresa de postres Dhul, que presentó este lunes el concurso de acreedores en Granada, suman cargas hipotecarias por un valor superior a los ocho millones de euros.

Nueva Rumasa tiene actualmente a una treintena de empresas en situación 'preconcursal'. La deuda bancaria del grupo supera los 700 millones de euros, lo que, unido a los pagos pendientes a proveedores, eleva el pasivo a alrededor de 1.000 millones de euros. Los principales acreedores son Banco Santander y Banesto, que, según datos de la compañía, suman 330 millones en créditos.