Los pastos gozan de buena salud

Durante 2010 se han realizado análisis de la tierra en 51 "llocs", en un total de 105 muestras. El 90 por ciento del muestreo pertenece a la zona del sur de la Isla, que es la que contiene el acuífero principal de donde se extrae la mayor parte del agua de consumo de Menorca. En referencia al contenido de nitrógeno nítrico en las tierras, se observan grandes diferencias entre localidades, pese que en su mayor parte (un 64 por ciento) tienen valores dentro de la normalidad y solo un 11 por ciento de los casos presentan valores altos. Teniendo en cuenta que las formas nítricas condicionarán el rendimiento más inmediato de un cultivo, es muy importante tener conocimiento de lo que hay antes de hacer la siembra para saber qué necesidades de abonado de fondo hay, en caso de que se necesite. Los casos en que hay cantidades elevadas de nitrógeno en forma nítrica se recomienda a los agricultores fraccionar las aplicaciones de abonado para perder el mínimo nitrógeno. Los nitratos que se encuentren en exceso y no sean aprovechados por un cultivo se perderán con las lluvias por escorrentía o por infiltración hacia los acuíferos, lo que supone una pérdida económica para el agricultor. Según se desprende del informe, se han detectado valores altos de fósforo y potasio en casi la mitad de las muestras, por lo que se recomienda utilizar otras formulaciones de abonos que aporten dosis equilibradas.

En cualquier caso, el estudio considera que el trabajo conjunto para promover una fertilización razonada "es un punto clave para lograr una mayor eficiencia en el manejo de cultivos y evitar riesgos de contaminación del agua" y apunta que "los beneficios que se alcanzan mediante esta línea de trabajo son múltiples".