En Menorca existen unos 4.000 puntos de atraque permanentes, de los cuales 2.650 se encuentran ubicados en las zonas portuarias. A estas cifras hay que añadir el millar de embarcaciones situadas en castas de varadero y cocheras, una estadística que se aprecia con mayor evidencia en temporada alta. Este es uno de los datos incluidos en el borrador del Plan Insular de Costas (PIC) que el Consell ha dado a conocer este fin de semana a las entidades e instituciones interesadas en la ordenación del litoral.
Se trata de un instrumento pionero a nivel nacional mediante el que se pretende regular los fondeos, limitar la afectación a los ecosistemas y zonas de baño, así como frenar la escalada de precios de los amarres en la Isla. Aunque el Consell carece de competencias en el litoral, cuenta con el respaldo del resto de administraciones (del Gobierno central a través de Costas y del Govern a través de Ports) y el Plan se revela además como una oportunidad para abordar la regulación de la costa de forma integral.
Entre la jornada de ayer y el viernes, quince colectivos diferentes ligados al ámbito marino, desde amarristas y asociaciones empresariales, pasando por colegios profesionales y representantes municipales, hasta ecologistas y estaciones náuticas, han analizado el documento redactado por la UTE Proes-AC Ingeniería Menorca, S. L.
El objetivo, según explicaron ayer el presidente del Consell, Marc Pons, y el conseller insular de Ordenación del Territorio, Joan Marqués, es completar y enriquecer el plan con las aportaciones de los agentes directamente implicados, con el fin de diseñar una propuesta consensuada que de una respuesta real a las demandas de los usuarios y administraciones competentes. A partir de ahora, tendrán aproximadamente un mes y medio para presentar su propuestas y sugerencias al equipo redactor. Tras su valoración, serán incorporadas al documento para posteriormente abrir un período de exposición pública.
"El trabajo no es fácil, es complejo por la superposición de diversas actividades en el litoral y todas ellas necesitan una respuesta", explicó el presidente insular, quien eludió concretar la fecha de la puesta en marcha del plan, a pesar de que se anunció en un principio para finales de este mismo año.
Pons se limitó a señalar que se implantará "de forma gradual", debido a la necesidad de recursos e indicó que en zonas como Canutells, el PIC ya se ha materializado con la ordenación de fondeos y en Es Grau será una realidad este mismo verano. "En Cala Molí también se hará y deberemos decidir qué hacer en Santandria y Sant Lluís", añadió.
Joan Marqués informó asimismo que el borrador del Plan Insular de Costas se ha elaborado en función de los datos arrojados por las fotografías aéreas recogidas en tres vuelos realizados en agosto de 2009 y 2010 (a primera hora de la mañana y de la tarde). El documento se ha completado con un trabajo de campo en el que se incluyen entrevistas a los principales agentes implicados y con información facilitada por el propio Consell.
El borrador contiene igualmente una ficha individualizada de cada una de las playas (de los servicios y usos diferenciados en caso de arenales vírgenes y urbanos como por ejemplo la disponibilidad de rampa varadero, entre otras cuestiones). Analiza la ubicación de las marinas secas próximas a la costa, describe la actividad y uso de los puertos, la densidad de los fondeos en zonas de baño y su grado de saturación, así como los amarres y los fondeos en áreas ambientalmente protegidas, entre otros factores.
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