La crisis se ceba en las ferias

El proyecto jamás llegó muy lejos, y analizado el calendario de 2011, a la vista está que se trata de una infraestructura innecesaria. Los recortes presupuestarios por culpa de la crisis han menguado la actividad ferial. Así, este año, tras tres años de ausencia, y tal y como reconocía ayer la actual responsable de Ferias y Mercados, Beatriz Lapiedra, se da por irrecuperable la feria de razas autóctonas, una de las más caras. Igualmente se cae el Mercado de Todos los Santos, y las ferias de antigüedades y de coches de segunda mano, todas ellas por falta de presupuesto.

Actualmente, la muestra más importante de Ciutadella es la recién celebrada por Sant Antoni, una cita para la que inicialmente se presupuestaron 4.000 euros y sólo se gastaron 2.000, según recuerda Lapiedra. En 2006, el Ayuntamiento manejó para todas las ferias una cifra cercana a los 90.000 euros, una época en la que tampoco se puede pasar por alto que se invirtieron muchos fondos en el material que actualmente se utiliza, como las carpas. La concejala socialista reconoce que en la actualidad la mayor parte de los gastos está dedicada a lo contratación de servicios de seguridad.

Citas para 2011
En lo que se refiere a las ferias pendientes, si se exceptúan las del libro, que dependen del área de Cultura, el municipio sólo tiene por delante la octava edición del mercado navideño y el mercado artesano de invierno, ambas citas a principios de diciembre. En cuanto a los mercados estacionales, se mantienen en verano el de Capllonch y el artesano en la Plaça de la Catedral.