El GOB ha reclamado una protección especial para la fachada marítima situada entre la Costa de Ses Voltes y la Costa de Ses Piques que, según han apuntado, conserva todavía elementos de gran interés estético, arquitectónico e histórico.
En este sentido, han propuesto incorporar todo este frente al Catálogo de Protección del Patrimonio Arquitectónico. Esta es una de las propuestas incluidas en el documento que el grupo ecologista ha hecho llegar al alcalde de Maó, Vicenç Tur.
En otro orden, el informe plantea que el tráfico de mercancías del puerto se relacione "estrechamente" con el Polígono Industrial. La organización considera que POIMA sería el lugar ideal para acumular los contenedores, así como para ordenar y distribuir sus contenidos, evitando de este modo el "actual espectáculo" de contenedores cerca de la Estación Marítima.
En relación al futuro de Cala Figuera, el GOB apuesta por recuperar la zona para desarrollar las actividades del Club Marítimo de Mahón. Asimismo, el documento propone también revisar los parámetros urbanísticos de Cala Llonga para evitar la "desafortunada" transformación de núcleo que, según han criticado, "desluce la visión de s'Altra Banda".
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