El instituto Pasqual Calbó de Maó se está convirtiendo en un referente en el Archipiélago en lo que a educación ambiental se refiere.
Relata el responsable de esa área en el centro, Josep Xabuch, que hace ya seis años que comenzaron a participar en proyectos relacionados con la ecología y la preservación del medio ambiente a nivel balear, un proceso que culminó el año pasado con la intervención en un proyecto estatal, el denominado Programa de Recuperación y Utilización Educativa de Pueblos Abandonados, que llevó a un grupo de estudiantes hasta la localidad oscense de Bubal, donde colaboraron en la rehabilitación del pueblo a finales del pasado mes de noviembre.
Nuevo proyecto
La gran respuesta por parte de los estudiantes ha llevado al centro educativo a inscribirse de nuevo en el proyecto, aunque tal y como reconoce Xabuch, "es difícil" que se lo vuelvan a conceder. No obstante, decidieron optar a otra línea de actuación promovida también desde el Ministerio de Educación, bajo el título de Centros de Educación Ambiental, y recientemente se les ha concedido.
Así, un grupo de 25 estudiantes matriculados en tercero y cuarto de la ESO participarán en esa cita que se celebrará en la localidad cántabra de Viérnoles el próximo otoño. El Pasqual Calbó será el único instituto de Balears de este programa nacional, y lo hará compartiendo su proyecto con otro centro educativo de Valladolid.
Durante su estancia en el albergue se formará a los jóvenes para que adquieran conocimientos que puedan mejorar el entorno medioambiental, pero también habrá tiempo para realizar diferentes talleres y recorrer itinerarios por tierras cántabras, como la visita al Parque Natural de las Dunas de Liencres.
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