La agencia de detectives contratada por Valeriano Allès para investigar a su competencia concluye que las tres familias más importantes del sector de la construcción en Menorca (Palliser, Mercadal y Barber) controlan al Consell y a su presidente, Marc Pons, pagando un sueldo a la mujer de Pons a través de tres empresas del sector: Construcciones Olives SL, Torrent Coll SL y Sucesores de Torrent SL. Así se explica en el documento de 57 páginas al que ha tenido acceso este periódico.
Los detectives de Método 3 detallan cómo realizaron un seguimiento intensivo a la mujer del presidente –se llega incluso a detallar el color del pelo de una de las hijas del presidente, la compra de una bolsa de "Cheetos" en un supermercado o la panadería concreta en que adquiere una baguette- para acabar demostrando que no trabaja en ninguna de las empresas de la construcción de las que percibe un salario que llegó a sumar, según los detectives, 40.000 euros. Esta cantidad, prosigue el documento de los detectives, se compensaba entre las diferentes empresas mediante facturas y otros pagos desde el grupo Prefabricados Menorca.
En el informe también se asegura que estas tres familias de la construcción controlaban las adjudicaciones de obras públicas que se realizaban desde el Consell, llegando incluso a compensarse económicamente entre ellas por estas adjudicaciones.
El informe de la agencia Método 3 desvela también que la cantera que explotaba Valeriano Allès, la de Son Sintes, era objeto de deseo de alguno de sus competidores, como los dueños de Impresa, quienes llegaron a ofrecer más dinero a los propietarios de los terrenos para hacerse con la explotación de la cantera una vez Allès fuera desalojado de la misma.
En la edición de mañana del "Menorca" se ofrecerán más detalles de este informe.
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