El secretario general de la Federación Estatal de Agroalimentaria de CCOO, Jesús Villar, ha desvelado esta mañana que la empresa Quesería Menorquina hipotecó en enero de 2010 la fábrica de Maó por un importe de 15 millones de euros.
Villar ha asegurado que al sindicato no le consta que dicho dinero haya sido inyectado en el funcionamiento de las instalaciones de POIMA y, de este modo, superar los problemas de tesoreria.
Villar ha subrayado que la fábrica es totalmente viable, a pesar de los problemas de falta de liquidez que padece en los últimos meses, por lo que exige al Govern, Consell y Kraft que negocien con Nueva Rumasa el traspaso del negocio a una empresa solvente.
El objetivo prioritario del sindicato es la continuidad de la planta y de los puestos de trabajo.
Además, el secretario general de CCOO en la Isla, Ramon Carreras, ha solicitado la implicación de toda la sociedad menorquina para salvar la fábrica, mientras que el presidente del comité de empresa, Antonio Olives, ha explicado los problemas en la cadena de producción , fruto de la mala gestión empresarial.
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