excavación. El martillo neumático adaptado a la excavadora ya ha ganado 80 metros de túnel a la montaña de Ferreries - Archivo

TW
0

Las obras de construcción del desvío de la carretera general a su paso por Ferreries avanzan a buen ritmo, salvando los pequeños obstáculos que van surgiendo a medida que las máquinas van dando forma al proyecto viario más importante de los últimos años. Uno de estos impedimentos obligará a modificar ligeramente el trazado del desvío en la conocida como Costa de Sa Quadra, la rampa ascendente que se encuentra antes de la llegada a Ferreries si se circula desde Ciutadella.

Los técnicos de Ferrovial Agromán han detectado que el terreno que sustenta la actual calzada no tiene la consistencia suficiente para aguantar la nueva estructura.

Es un problema leve, que no se pudo detectar en los estudios geotécnicos previos a la ejecución de la obra. Esto implicará que la nueva calzada se tendrá que desviar aproximadamente un metro de media hacia el margen izquierdo de la carretera, es decir, hacia la zona donde se deberá habilitar el tercer carril de esta rampa y en la que actualmente se están realizando unos notables movimientos de tierra que permiten ver ya cómo se ampliará la calzada. Se trata, explican desde la empresa adjudicataria, de "unos ajustes de trazado que no tendrán repercusión ni sobre los plazos de ejecución de la obra ni en sus costes".

Otro de los puntos delicados del proyecto es la construcción del túnel. A día de hoy, ya se ha excavado la mitad del terreno que hay que ganar a la montaña. En total, son 160 los metros que habrá que excavar en la tierra, y actualmente ya se han alcanzado los 80. Cuando las máquinas hayan agujereado la longitud necesaria de montaña, entonces se podrá construir la otra parte del túnel necesaria para llegar a los 252 metros de longitud previstos en el proyecto. Estos tramos se construirán en cada una de las bocas del túnel, y se conocen como "falso túnel", puesto que no se ganan a la montaña.

En este punto, la consistencia del terreno también era una incógnita. Tanto era así que Ferrovial había presentado dos alternativas para excavar el túnel. Si el terreno era duro, se abriría paso en la montaña usando explosivos. Si la consistencia era menor, bastaría con las máquinas. Finalmente, el terreno ha resultado más suave de lo previsto, y la roca estaba bastante fracturada, con lo que se ha optado por adaptar un martillo neumático a una excavadora, con la cual se va horadando la montaña.

En principio, la excavación del túnel y la ejecución de todo el proyecto siguen los plazos previstos. Desde la dirección de la obra se explica que la lluvia de estas últimas semanas ha trastocado en algunos momentos los planes de la empresa, puesto que el terreno quedaba totalmente humedecido y entonces no se podía llevar a cabo el movimiento de tierras necesario para acometer las obras. Este inconveniente ha sido solventado, comentan fuentes de la empresa, con el trabajo realizado en otros momentos del día. Así, se ha trabajado en fines de semana, y también, cuando la luz natural falta, se habilitan sistemas de iluminación artificial para que las máquinas puedan seguir trabajando. Con estas soluciones, desde Ferrovial se asegura que a día de hoy no se acumula ni una jornada de retraso sobre los plazos de ejecución inicialmente previstos.