Nunca un ascensor había dado tanto que hablar y para Bernd Fechner, propietario del restaurante Thai Country, ha sido un asunto que ha puesto a prueba su paciencia.
Hay que remontarse al año 1999, momento en el que el Ayuntamiento de Maó ya contemplaba la posibilidad de reordenar el puerto mediante la instalación de un ascensor panorámico que conectara el Moll de Llevant y el Paseo Marítimo, una iniciativa presentada por el Casino Marítimo.
Fechner entra en dicha historia en 2003, cuando compra un terreno con la intención de poner en marcha un restaurante. "La idea de que se instalara un ascensor me parecía positiva porque permitiría contar con las plazas de aparcamiento del paseo, era vital para todos", explica el hostelero, quien afirma que decidió comprar el terreno contiguo sabiendo que sería para expropiar y llevar a cabo el proyecto.
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