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El Grupo Popular en el Consell insular ha presentado una enmienda a la totalidad de los presupuestos que el equipo de gobierno ha confeccionado para 2011, al asegurar que son "poco sociales". En este sentido, señala que el PSOE y PSM-Verds recortan en un millón de euros el gasto social, "tijeretazo que se eleva a más de un 10 por ciento desde el inicio de la legislatura", asegura la portavoz del Grupo Popular, Juana Francis Pons Vila.

El PP sostiene que estos datos demuestran que los presupuestos del Consell no presentan una clara vocación de atender las necesidades de los ciudadanos, originadas por la grave situación económica. Por ello, Pons Vila añade que "ante el recorte del gasto social del Gobierno central y del Govern balear, lo que cabría esperar del Consell es una apuesta más decidida por la vertiente social, y más teniendo en cuenta que la institución insular está gobernada por partidos que presumen de progresistas".

Pons Vila recuerda que el PP nunca ha solicitado recortes en gastos sociales, sino todo lo contrario, y sobre todo en cuanto a la reducción inmediata de la macroestructura política insular. "Ya en 2007 la supuesta llegada de nuevas competencias, que ahora a finales de la legislatura se ven incompletas, no justificaba ni entonces ni ahora esta superestructura", señala.

La portavoz del Grupo Popular califica de "operación de maquillaje" el recorte del capítulo de personal para 2011 puesto que sólo se reduce cuantitativamente en algo menos de 17.000 euros, lo que –a su juicio– es una cantidad mínima para una institución que maneja un presupuesto de 93 millones de euros. En este sentido, recuerda que los presupuestos prevén un recorte de la Conselleria de Cooperación Local del 26 por ciento, "algo que no ayuda precisamente a otros sectores como podría ser la construcción de pequeña obra pública".

Pons Vila recuerda que el PIB de Menorca para este año se sitúa en un menos 1,5 por ciento, cuando el 2009 se produjo "un crecimiento negativo del 4,5 por ciento, más de 7.000 parados, una deuda de 42 millones y encima con recortes sociales. Esta podría ser una radiografía de la grave situación por la que atraviesa Menorca", concluye.