La madre del niño ahogado en la bañera confesó la autoría del crimen a la Policía y al juez

TW
0

El Ministerio Fiscal estudia imputar a Mónica Juanatey un delito de asesinato. El resultado de las pruebas periciales solicitadas al Juzgado de Instrucción número 2 de Maó será determinante para que la Fiscalía concrete la calificación de lo hechos.

A pesar de que existe una prueba de cargo clara, como es la confesión de la propia madre, quien declaró ante el juez y la Policía que mató al pequeño, aún quedan pendientes algunas lagunas en el caso que deberán ser clarificadas a través de las diferentes pruebas solicitadas.

Será necesario realizar una inspección ocular del lugar donde la acusada acabó con la vida de su hijo y la práctica de diferentes testificales de los abuelos, del padre del niño y de una amiga de la acusada. Especialmente valiosas serán las pruebas periciales solicitadas tanto por la defensa de Juanatey como por la Fiscalía.

Destaca la exploración psiquiátrica y psicológica de la detenida que deberá realizar el forense para determinar la anomalía mental o alteración psíquica de la madre, así como las pruebas realizadas al cadáver del niño. En este sentido, según ha podido saber el "Menorca", serán igualmente determinantes en el proceso judicial a la hora de calificar los hechos los resultados de los marcadores de ADN, así como la altura y peso del pequeño.

Penas de entre 10 y 25 años

El titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Maó imputó el pasado lunes a la acusada un delito de homicidio doloso según el artículo 138 del Código Penal castigado con una pena de prisión de diez a quince años. Esta misma calificación coincide con la hecha en un principio por la Fiscalía, sin perjuicio de que una vez analizadas las pruebas, estas determinen que los hechos puedan constituir un delito de asesinato según recoge el artículo 139 del Código Penal.

En ese caso, la acusada se enfrentaría a una pena de entre quince y veinte años, si concurren en su caso alguna de las circunstancias de alevosía, ensañamiento y precio, recompensa o promesa.

Además, si el Ministerio Fiscal determina que concurren a la vez dos de estas circunstancias aplicaría según la Ley un agravante recogido en el artículo 140 del Código Penal, en este caso la acusada se enfrentaría a una pena de entre veinte y 25 años.

El expediente incoado por el Juzgado de Instrucción número 2 de Maó acaba de iniciarse y aún quedan por conocer el resultado de las diversas pruebas periciales solicitadas, así como las declaraciones de los abuelos y el padre del pequeño. El abanico de circunstancias en las que se puede apoyar el Ministerio Fiscal para basar su escrito de acusación aún es muy amplio y deberá terminar de perfilarse.

De momento, el plazo de cinco días que el juez tiene para admitir o no las diferentes pruebas periciales y testificales solicitadas por las partes concluyen hoy mismo.

Mónica Juanatey, de 30 años y natural de Noia, Galicia, fue detenida el pasado viernes 26 de noviembre en Maó tras el hallazgo del cadáver de su hijo de nueve años dentro de una maleta en una zona apartada de Binidalí. Tras reconocer la autoría del crimen ante la Policía y el titular del Jugado de Instrucción número 2 de Maó, actualmente se encuentra en la prisión de mujeres Palma a la espera de ser juzgada por un jurado popular.