"El Club Marítimo de Mahón debe gestionar amarres"

Antonio Hernández Pons, de 61 años, tiene prácticamente perfilada la candidatura que concurrirá al proceso para la elección de una nueva junta directiva, que sustituirá a la actual junta presidida por Fernando Rita. Los miembros de la lista son de mediana edad y todos ellos son más jóvenes que el propio aspirante a la presidencia de la entidad, "he buscado a personas con ganas de trabajar y he procurado que todos tengan la aceptación de los socios. Uno de mis objetivos es el de cohesionar la masa social", asegura.

Hernández reconoce que la gestión de amarres sería una buena fuente de ingresos para el Club Marítimo, por lo que ha asegurado que, en caso de resultar elegido presidente de la entidad, iniciará los pasos necesarios ante Autoridad Portuaria para recuperar esta actividad. En este sentido, ha señalado que uno de los objetivos son los amarres que en su caso puedan habilitarse en la zona de Cala Figuera, "sin abandonar la idea de recuperar la gestión de los amarres que se ubican en la zona portuaria frente a la sede social de la entidad", ha asegurado. Asimismo, ha subrayado la importancia que representa para el club el hecho de gestionar la gasolinera para embarcaciones, que precisamente tiene pendiente un proyecto de ampliación.

Asimismo, Hernández pretende incrementar la vida social del Club Marítimo, al objeto de que los asociados frecuenten con mayor asiduidad las instalaciones de la entidad. Para ello, apuesta por la organización de sesiones de baile de salón y de actos con aperitivo y ambientación musical, así como la habilitación de una biblioteca de carácter general con una sección especialmente dedicada a los temas náuticos. No obstante, también deja abierta la opción a que los propios socios aporten cualquier propuesta que ayude a dinamizar la entidad.

El candidato a la presidencia del Club Marítimo apuesta por mantener la regata de la Copa del Rey de barcos de época y, por otra parte, asegura que le gustaría recuperar la regata Menorca-San Juan que desde hace un par de años ha dejado de celebrarse. "La sección deportiva está muy viva, hay que captar a más gente joven y potenciar el buen trabajo que ha hecho la actual junta directiva", asegura.

Hernández está ligado desde su juventud al Club Marítimo de Mahón, cuando a los 7 años empezó a participar en las regatas que organizaba la entidad, afición que desarrolló de forma continuada a partir de los 15 años, "desde mi infancia he frecuentado el Club Marítimo, una entidad a la que aprecio mucho", asegura. Después de unos años de estancia en la Península, Hernández formalizó su inscripción como socio en enero de 1993 y, desde entonces, siempre ha colaborado en la organización de actividades y ha participado en la vida social de la entidad. "Actualmente, colaboro con el comité de regatas, una especie de jurado que está en el mar para regular la salidad y llegada de los participantes, entre otras cosas", afirma.