El libro planta cara a las nuevas tecnologías pese a que el papel cada vez está más amenazado por las plataformas de ocio alternativas como internet. El próximo domingo se celebra el Día Internacional de la Biblioteca, y Menorca está de enhorabuena si se tienen en cuenta las estadísticas realizadas por la Xarxa de Biblioteques de Menorca correspondientes a 2009, que ponen de manifiesto cómo en dos años el número de usuarios se ha incrementado en un 55 por ciento. A dicha cifra habría que sumar además los datos correspondientes a la Biblioteca de Maó, que no está incluida en la red insular, ya que se gestiona por el Estado a través del Govern.
El informe califica el crecimiento como "espectacular", aunque resulta justo hacer hincapié en que dicho aumento se debe en gran parte a la consolidación de servicio de internet en las bibliotecas. Tal y como avanza la coordinadora d'Arxius i Biblioteques del Consell, Elisa Fernández, la vertiente tecnológica se seguirá potenciando en algunos centros con la incorporación de nuevos ordenadores portátiles.
Y es que, el uso de las nuevas tecnologías de información y comunicación dentro de las bibliotecas creció en 2009 respecto al año anterior un 79 por ciento, mientras que los usuarios de la red wi-fi lo hicieron en un porcentaje aún mayor, el 98 por ciento. El año pasado visitaron las bibliotecas de la red insular 184.414 personas (un 43 por ciento más que en 2008), y uno de cada cinco utilizaron los servicios relacionados con las nuevas tecnologías.
El libro sigue al frente
No obstante, el libro sigue todavía reinando en solitario con un 57 por ciento de los préstamos, seguido de lejos por el material audiovisual (35 por ciento) y los discos (5,5). Las revistas sólo representan un 0,69 por ciento de las operaciones. El progreso de los préstamos es uno de los principales indicadores del buen funcionamiento de la red de bibliotecas, que sigue creciendo año tras año, y entre 2008 y 2009 lo hizo en un 13 por ciento, con una oferta de 89.405 documentos de diferentes tipos.
La memoria de la red pone de manifiesto que las bibliotecas se han convertido con el paso del tiempo en un importante servicio para las personas que residen esporádicamente en Menorca, ya sea en calidad de trabajador o como turista. En ese sentido cabe destacar un hecho significativo en Ciutadella, donde se ha llegado a utilizar el carnet de biblioteca para demostrar la residencia en el caso de algunos inmigrantes.
En relación a las visitas de la población a las bibliotecas, en términos absolutos se puede decir que cada español visita una dos veces al año, mientras que los menorquines, según el estudio, lo hacen 2,85 veces al año.
En las conclusiones de la memoria se sostiene que, dejando a un lado la polémica sobre la supervivencia del libro y los bajos niveles de lectura, los centros de lectura representan un servicio cultural que "tiene gran aceptación" entre la población. De igual forma, se afirma que las inversiones realizadas por las administraciones en dichos equipamientos "son más que rentables".
Finalmente, cabe reseñar que en la actualidad se está trabajando en la elaboración del Mapa de Lectura Pública de les Illes Balears, una herramienta que en el futuro permitirá establecer las necesidades de cada biblioteca en función de los usuarios que tiene y sus instalaciones.
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