inauguración. La directora Alejandra Marín junto al alcalde Vicenç Tur y el concejal Joan Carles Villalonga - Javier

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El Centro de Educación de Personas Adultas Joan Mir i Mir de Maó, que aglutina los municipios de Alaior, Sant Lluís i Es Castell, arrancará el lunes el nuevo curso escolar con 2.022 inscritos.

Estas cifras son similares a las matrículas del año pasado cuando el centro comenzó el curso con 36 alumnos más que este año -aunque en noviembre la cifra ya superara los 2.300 alumnos-. Esta línea en paralelo y sin variaciones en lo que se refiere a matriculación se debe a la falta de espacio y, por tanto, a la imposibilidad de incrementar el número de grupos. Este problema que el centro Joan Mir i Mir arrastra desde hace más de diez años ha sido el principal motivo por el que 177 personas estén a día de hoy en lista de espera.

En este sentido, las ofertas que se han visto desbordadas han sido los cursos de idiomas con 72 personas en lista de espera, los cursos para preparar los accesos a ciclos formativos de Grado Superior y a la universidad con 41 matrículas en lista de espera así como la formación reglada ESPA (módulos de educación secundaria para personas adultas a distancia) del que se han tenido que excluir a 29 personas y otras cuatro en el curso de Pre-ESPA. Para la directora del centro, Alejandra Marín, los cursos reglados y los accesos son las formaciones que más preocupan "dado que somos de los pocos centros que ofrecemos esta oportunidad a la población y cuyo coste es más bien simbólico".
Asimismo, Marín resalta que se tuvieron que cerrar las matrículas en el nivel cuarto de ESPA y los ciclos formativos a la primera semana del periodo de matriculación.
Por otra parte, la directora remarca la apuesta de la Consellería por las agrupaciones modulares del ciclo formativo de Grado Medio de Técnico en Gestión Administrativa y en Atención Sociosanitaria para Personas en Instituciones Sociales "que este año hemos conseguido por primera vez dos jornadas completas.

Cabe destacar a su vez que el centro adaptará las clases de preparación para los certificados oficiales de conocimientos de catalán al marco común europeo que "aunque aún no se haya publicado la normativa estamos preparados para adecuarnos a ella", destaca.

Marín apunta que el centro forma parte de un proyecto europeo dirigido a estudiar el estado de la educación para adultos "y en Europa alucinaron con que el siete por ciento de la población mahonesa cursara alguna formación para adultos, es uno de los porcentajes más altos a nivel nacional". Con ello, Marín reconocía ayer su satisfacción por poder ofrecer tan amplia oferta formativa (más de 60 cursos) y contar con tan importante número de matriculados.

En la inauguración del curso académico celebrada ayer, el Ayuntamiento de Maó, representado por el alcalde Vicenç Tur y el concejal de Educación, Joan Carles Villalonga, reconocieron los problemas de espacio motivo por el que "trabajamos para agilizar al máximo el proceso para la construcción de la nueva escuela", destacaba Villalonga.