El Consell reincide en sus errores

Las recomendaciones para corregir tales defectos también inciden en los mismos términos que en 2006: elaboración de un plan financiero a medio plazo, un plan estratégico de subvenciones que aporte transparencia y control, y mayor claridad en los procesos de adjudicación de obras. La Sindicatura de Cuentas también reitera la necesidad de establecer penalizaciones para aquellas empresas que incumplan los plazos de ejecución.

En primer lugar, la Sindicatura de Cuentas explica que "el presupuesto del Consell de 2007 no cumple el objetivo de estabilidad presupuestaria, ya que existe una necesidad de financiación de 6,9 millones de euros", a lo que cabe sumar una capacidad de financiación negativa de 3,2 millones.

En cuanto a los créditos, el informe apunta que el saldo positivo de las cuentas de 2007 exime al Consell de la necesidad de ser autorizado para solicitar nuevos préstamos. Aunque matiza que el balance económico no contempla un crédito concertado y no dispuesto que, de incluirse, dejaría el saldo en negativo.

Por lo que respecta a las subvenciones, la Sindicatura no se corta: "El Consell no aprueba un plan estratégico (...) y no aporta un registro de subvenciones, ni un sistema que muestra de manera completa y ordenada su actividad subvencionadora". Detalla que sólo un 42 por ciento de las ayudas se han otorgado cumpliendo con la concurrencia competitiva, por lo que el 58 por ciento restante "supone una excepción a los principios generales establecidos", práctica que debería limitarse de forma restrictiva a casos muy justificados.

Por lo que respecta a los contratos, la Sindicatura de Cuentas reclama que los expedientes incluyan una acreditación de la disponibilidad de crédito. Además echa en falta una mayor transparencia en los procesos, por lo que recomienda "que los criterios para la adjudicación de concursos sean mensurables de manera objetiva y que se haga una valoración motivada y justificada de las puntuaciones".