Puerto. El trasiego de embarcaciones junto a la estación de servicio era constante en la tarde de ayer - Gemma Andreu

TW
0

La escena cada vez es más habitual en el mes de agosto, pero sigue llamando la atención. En la mañana de ayer se produjo una pequeña aglomeración de embarcaciones junto a la gasolinera que gestiona a través de una concesión el Club Marítimo de Mahón en el Moll de Llevant. Según comentó algún testigo, el tiempo de espera para repostar se prolongó en algunos casos hasta varias horas, incidencia que provocó más de un enfado. Se da la circunstancia de que un día antes, el domingo, este mismo surtidor se quedó sin gasóleo A apenas superado el mediodía y, por este motivo, ayer eran muchos los usuarios de embarcaciones de recreo que pretendían llenar sus depósitos a primera hora.

Escasa capacidad
Fernando Rita, presidente del Club Marítimo de Mahón, explicó al respecto que esta estación de servicio dispone de sólo dos tanques de 20.000 litros cada uno para dispensar gasóleo A y gasolina, y que desde hace un año el club espera el permiso de Autoridad Portuaria de Balears (APB) para ampliar la instalación. "El domingo el tanque de gasóleo A estaba lleno, pero repostaron dos barcos de gran capacidad y nos quedamos sin combustible a las doce de la mañana", fue el motivo aportado por Rita para justificar la falta de gasóleo, al tiempo que lamentó los problemas de suministro que el Marítimo tiene durante los domingos.

El club pretende instalar dos depósitos nuevos de 50.000 litros de capacidad para suministrar gasóleo A y B (este último para pesqueros y golondrinas), y mantener el actual depósito de gasolina con capacidad para 20.000 litros. El nuevo proyecto permite incluso aumentar en un 30 por ciento la superficie de la explanada deportiva. Hace más de un año presentó a Autoridad Portuaria este proyecto con el fin de ampliar las instalaciones, pero aún está a la espera de una respuesta.

El Marítimo quiere asimismo ampliar la concesión de la gasolinera en diez años más para rentabilizar esta inversión, es decir, desde 2014, fecha en la que vence la ocupación temporal, hasta el 2024. El cumplimiento de las pretensiones de la entidad permitiría además cambiar los surtidores por otros más modernos y con mayor caudal para agilizar las maniobras de repostaje y evitar así las aglomeraciones de embarcaciones alrededor de la estación además del consiguiente malestar.