Antonio de la Rosa llegó ayer a mediodía al final de la aventura que le ha llevado por Menorca, Mallorca, Eivissa y Formentera, alcanzando las cimas más altas de cada una de las Islas y moviéndose en bicicleta o en kayak de estilo polinesio durante 50 horas.
Hacia las 10 horas de ayer De la Rosa salía desde la playa ibicenca de Ses Salines con destino a Formentera. Tenía por delante la travesía más corta (ocho o nueve millas), aunque fue también la más concurrida en cuanto a tráfico marítimo, lo que hizo que volcara dos veces la embarcación.
Sobre las 13 horas volvió a montarse en la bicicleta y recorrió Formentera hasta alcanzar la última cima: La Mola.
De la Rosa explicó que el último tramo le resultó también costoso y confesó que "hasta que me he encontrado la inesperada y dura subida a La Mola, el punto más alto de la isla, que se encuentra en medio de unos pinares preciosos".
En total, han sido más de 200 kilómetros por tierra y otros 150 kilómetros por mar en unas escasas 50 horas las que ha recorrido este vallisoletano afincado en Madrid, durmiendo apenas hora y media en todo este tiempo.
Al filo de las 14 horas llegó al final de la aventura, y reconoció que "han sido dos horas más de las 48 horas que nos habíamos planteado, pero la prioridad era terminar y estoy muy satisfecho de haberlo conseguido. Además, es algo que no había hecho nadie y no teníamos referencias del tiempo que podía llevarnos. Los paisajes han sido espectaculares y muy variados".
Aunque De la Rosa lo consiguió también admitió que "ha sido algo muy duro, incluso más de lo que me pensaba".
El reto empezó el jueves pasadas las 12 horas del mediodía en la fortaleza de La Mola, en Menorca.
En la jornada anterior, de Mallorca a Eivissa, el deportista realizó la travesía en su kayak polinesio. La distancia que debía culminar es de casi 50 millas,, unas 14 horas de constante paleo.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Menorca - Es diari
De momento no hay comentarios.