Unos ladrones rompen la pared de una nave industrial y se llevan 20.000 euros

Las primeras investigaciones tras el suceso apuntan a que el robo es obra de gente preparada para ello. La propiedad de la empresa explica que los delincuentes arrancaron los cables de telefonía antes de entrar en el edificio, evitando de esta manera que la alarma funcionara y pusiera en alerta a las fuerzas de seguridad. "Todo indica que sabían dónde iban", añaden los titulares del negocio. Algo que matiza Javier Bermejo, al asegurar que "o bien se trata de un grupo de profesionales, o de gente que ha podido tener datos que les ha facilitado un atraco de este calibre". El secretario de la Administración General del Estado añade que "no podemos descartar que el éxito del robo haya sido casual, pero esta no es la principal hipótesis actualmente".

Primeras investigaciones

La investigación se centra ahora en el análisis de las cámaras de seguridad instaladas en la zona, para comprobar si captaron alguna imagen en el momento del robo. No obstante, Bermejo ya avanza que "estas investigaciones no son como las de las series de televisión, no es probable que se encuentren huellas o pelos que puedan ser analizados. Lo más útil en estos casos es la información que se pueda obtener en la calle, que permita atar cabos. Es por ello que estamos trabajando al pie de la nave, pero también buscando información". De momento, algo condiciona la labor de los investigadores: "Es un golpe que queda fuera de los métodos habituales de la gente que delinque en Menorca. No se trata de una simple patada en la puerta, sino que es un acto preparado y que requiere un esfuerzo. Esto nos permite descartar una serie de personas que ya conocemos", explica Bermejo.