El Partido Popular ha cuantificado en cuatro millones de euros el ahorro que conseguiría el Consell insular si aplicara el decálogo de recortes propuesto por la oposición, en el que se incluye la eliminación de dos consellers no electos y doce cargos de director insular de área.
La oposición aguarda todavía la respuesta del equipo de gobierno a su petición de pleno extraordinario para debatir las medidas estatales contra el déficit público y los recortes a aplicar en el Consell de Menorca. La portavoz del PP en la institución, Juana Francis Pons Vila, recordó ayer que el último día hábil para celebrar dicha sesión es el 7 de junio y que el presidente, Marc Pons, está obligado a convocarla. Según Pons Vila, el presidente socialista "ha perdido la oportunidad de retomar la iniciativa" y de "pactar cualquier tipo de acción" relativa a la reducción del gasto. La consellera afirmó que todavía "no sabemos qué piensa hacer" porque Marc Pons "aún no se ha manifestado", aunque también apuntó que el presidente quizá "está negociando a la chita callando con la señora Allès, a ver qué le deja o no recortar". Pons Vila también calificó las informaciones relativas a la reestructuración de personal en el Consell como "un globo sonda" que no se ha concretado.
Por su parte, el presidente del partido, Santiago Tadeo, afirmó que el equipo de gobierno "nos tendrá a su lado para adelgazar la Administración y tomar auténticas medidas para reactivar la economía". Tadeo criticó que el presidente del Consell no haya tomado decisiones inmediatas de recorte del organigrama y rechazó las últimas medidas estatales de prohibir el endeudamiento de los ayuntamientos, "que son la administración más pobre y la menos endeudada a nivel global en el Estado", si no se recorta antes la deuda del propio Gobierno y de las autonomías.
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