La construcción del desvío de la carretera general a su paso por Ferreries generará 406 puestos de trabajo directos y otros 731 empleos indirectos, con un presupuesto previsto para la contratación de mano de obra de 5,2 millones de euros. Son nuevas cifras del proyecto de infraestructura viaria adjudicado a la Unión Temporal de Empresas (UTE) formada por Ferrovial y Concesiones y Contratas Illes Balears, S.L., que fue presentado ayer en el salón de plenos del Consell ante vecinos, alcaldes, constructores, colectivos profesionales y sindicatos, en un acto en el que intervinieron tanto técnicos como el alcalde de Ferreries, Josep Carreres, el conseller de Movilidad, Damià Borràs, y el presidente de la institución, Marc Pons.Con un brindis y la exposición de la obra, políticos y representantes de la adjudicataria del proyecto, entre ellos Juan Lozano y José Baraja, directivos de Ferrovial, y José y Llorenç Palliser Barber, consejeros delegados de Concesiones y Contratas Illes Balears, S.L., celebraron el inicio inminente de la ejecución de un proyecto esperado y "necesario" para Menorca, según resaltó el conseller Damià Borràs.
Se trata asimismo de la obra pública más cara contratada nunca en la isla, con una inversión de 24.736.360 euros. El desvío se iniciará desde Maó hacia Ciutadella en el punto kilométrico 26,250 y desde Ciutadella a Maó en el punto 30,480, con una longitud de 4.806 metros, de los cuales 252 discurrirán a través de un túnel.
Hecho histórico
Durante la presentación el presidente del Consell, Marc Pons, destacó dos momentos fundamentales para que hoy, treinta años después de iniciarse las reivindicaciones ciudadanas para conseguir la variante, la obra esté a punto de ejecutarse. Por un lado, la transferencia de las competencias de Carreteras al Consell en la legislatura 1999-2003, en la cual también se acordó el trazado de la nueva vía, y la firma del convenio con el Gobierno central, en 2009, para obtener los recursos económicos destinados a la construcción del desvío y a otras actuaciones del Plan de Carreteras, el primer acuerdo firmado directamente entre la Corporación insular y el Estado. Dicho convenio fue calificado de "hecho histórico" por el responsable de Carreteras de la institución, Damià Borràs. La construcción del desvío contará con cuatro intervenciones significativas: la construcción del túnel, la ordenación de las intersecciones con la carretera de Cala Galdana y el camino de Sant Patrici, y la solución del acceso al polígono industrial.
Trabajos previos
En la actualidad la UTE adjudicataria ha iniciado los trabajos previos a la ejecución en si del proyecto, que no empezará hasta comienzos de este verano, con la previsión de que concluya a finales de 2011.
La obra "debería estar hecha hace años", admitió ayer el conseller de Movilidad, Damià Borràs, aunque también remarcó que "llega en un momento crítico" de la economía insular y "oportuno", ya que "más del 70 por ciento de los puestos de trabajo serán para gente de Menorca, y también ayudará a recuperar y mantener la actividad económica y comercial de Ferreries". El alcalde de la localidad, Josep Carreres, comparó el proyecto con "un largo embarazo" y la infografía de la presentación con las ecografías de una criatura que se ha hecho esperar y a la cual "ya le vemos la cara y los ojos". El primer edil confió en que las imágenes virtuales den paso pronto a la realidad tangible de un proyecto al que "en Ferreries siempre hemos visto más ventajas que inconvenientes".
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