Aeródromo. La actividad podría verse favorecida por las condiciones meteorológicas y porque el volcán ha entrado en fase decreciente - Gemma

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La nube de cenizas volcánicas que desde el pasado miércoles ha sumido en un caos el tráfico aéreo en Europa, volvió a afectar ayer a Menorca, donde, a media tarde, cuatro de los 54 vuelos programados hubieron de ser cancelados. Según informaron fuentes de AENA, Reino Unido era destino y origen de las conexiones canceladas (dos llegadas y dos salidas ), operando con normalidad el resto de los vuelos programados en el Aeropuerto menorquín.

En el resto del Archipiélago, un total de 108 de los 494 vuelos programados con salida o llegada al Aeropuerto de Palma fueron cancelados, mientras que en el de Eivissa, se suspendieron 18 de los 97 vuelos previstos, siendo Reino Unido uno de los puntos más afectados, frente a Alemania, país que registró una fuerte disminución de las cancelaciones de vuelos, al haber recibido Air Berlin el lunes una autorización especial de la Aviación Civil del país germano. Así la aerolínea pudo reanudar sus vuelos entre este país y el resto de países de Europa, como España y Austria, informa Europa Press.

Sin embargo, esta situación contrastaba con la del Reino Unido, ya que la mayor parte del espacio aéreo británico permaneció cerrado por encima de los 6.000 metros de altura buena parte de la tarde de ayer, debido a que siguen preocupando los efectos de la nube volcánica.

Evolución
En este sentido, la llegada de bajas presiones a partir de mañana y las consiguientes lluvias, acompañadas de vientos de dirección norte, ayudarán a deshacer la nube de cenizas procedente de Islandia, según anunció ayer la Organización Mundial de la Meteorología (OMM).

"A partir del próximo jueves llegarán a Islandia bajas presiones, está previsto que el fenómeno dure al menos el viernes y el sábado. Las bajas presiones traerán las lluvias y por tanto cabe esperar que las cenizas se diluyan", señaló en rueda de prensa Herbert Puempel, jefe de la división de meteorología aeronáutica de la OMM.

A esta previsión meteorológica se le suma el hecho de que el volcán islandés Eyjafjalla, haya entrado en una fase decreciente, en la que expulsa menos ceniza y más lava.