Nueve bomberos cualificados más pueden prestar sus servicios en Menorca desde finales de enero. Tras finalizar su formación, estos profesionales han pasado a integrar una bolsa que servirá para cubrir las bajas temporales o refuerzos puntuales, así como las plazas de nueva creación. Los nuevos bomberos optaron a la realización de un curso básico, al que concurrieron 70 aspirantes, de los cuales trece fueron considerados aptos, seleccionándose únicamente nueve para participar en la acción formativa que acabó el pasado mes de enero.
La creación de esta bolsa responde, según fuentes del Consell, a la voluntad alcanzar el compromiso adquirido por la institución insular y los ocho ayuntamientos, todos ellos integrantes del Servicio de Prevención y Extinción de Incendios, de crear doce nuevas plazas de bomberos durante el presente mandato. La consecución de este objetivo está en entredicho habida cuenta las limitaciones impuestas por la Ley de Presupuestos Generales del Estado de 2009 que impiden la creación de nuevas plazas de bomberos a no ser que se cumpla el cien por cien de la tasa de reposición.
Esta limitación -contemplada en el artículo 23 de la citada ley- supone que se puede crear una nueva plaza por cada plaza que desaparezca por la jubilación de su titular, una circunstancia que no se da en el servicio de bomberos menorquín, en el que no hay bomberos profesionales en edad de jubilación. A pesar de que el Consell y los ayuntamientos impulsaron la tramitación de una modificación en 2008 y crearon cinco de la docena de plazas previstas para salvar esa limitación, la creación de las siete restantes prometidas dependen de un cambio en la legislación estatal.
A este obstáculo jurídico hay que sumar la circunstancia de que la última convocatoria de oferta pública de empleo se remonta a seis años atrás, trabajando este momento el Consell en la activación de esa OPE, en la que las plazas de bomberos de la convocatoria 2004-2006 serán las primeras que se sacarán. Todo ello crea incertidumbre entre algunos miembros del cuerpo -36 bomberos profesionales y 45 semiprofesionales, de los cuales doce son interinos, más el jefe del Servicio- que no tienen claro cuál será su futuro, según fuentes cercanas al colectivo.
No obstante, desde la institución insular confirman que "el Consell y los ocho ayuntamientos están estudiando todas las vías posibles para seguir incrementando las plazas hasta alcanzar el compromiso adoptado en 2008, un compromiso que es firme lo que implica no desistir hasta que sea una realidad".
El incremento en la dotación de personal debe venir complementada con la mejora de los medios materiales. En este sentido, el Servicio de Prevención y Extinción de Incendios cuenta este año con un presupuesto de 554.719 euros, de los cuales las principales partidas se destinarán a la nueva dotación de vehículos y a la adquisición de medios.
En este sentido, un integrante del servicio se desplazará esta semana a Madrid, donde se celebra entre mañana y el viernes SICUR, el Salón Internacional de Seguridad, a fin de conocer las novedades en estos medios.
Comisión de seguimiento del nuevo parque de bomberos de Maó
La construcción del nuevo Parque de Bomberos de Maó avanza a buen ritmo, según confirma el Consell. "En estos momentos se han ejecutado unos 725.000 euros de inversión, es decir, entre el 65 y el 70 por ciento de la obra, toda la parte estructural", informan fuentes de la institución insular. Estas mismas fuentes explican que se realiza una reunión semanal de seguimiento de la obra con la intervienen un técnico del Consell, los directores de obra y la empresa constructora. Según ha podido saber este periódico, está previsto que esta semana se celebre un encuentro en el que participarán miembros del Servicio de Prevención y Extinción de Incendios a fin de transmitir sus sugerencias y aportaciones con el objetivo de mejorar el resultado final del proyecto, cuya ejecución se licitó por 1,2 millones de euros.
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