Joan Piris pide a las autoridades más compromiso ante la crisis

En un entrevista en la que señaló que la Iglesia se plantea la ayuda a "puertas abiertas", con "programas racionales, no sólo de tapar el agujero", detalló que la competencia o la obligación no es de la Iglesia, "el deber lo tiene la autoridad civil". "Nosotros hacemos un trabajo de suplencia necesario, pero no para quitar el problema a otro. Debemos reivindicar: 'Oiga, la obligación la tienen ustedes, arrimen el hombro", aseveró. En este sentido, señaló que su experiencia en las diócesis de Cataluña y Balears le indica que la Administración pública "contribuye mucho" y que la ayuda es "mutua". Y a renglón seguido añadió: "Lo que quiero decir es que no estamos para reducir responsabilidades de otros ni para sustituirlas, complementarlas sí, y lo nuestro es servir al hermano. Pero vamos, si tenemos derecho a la subvención, la queremos, aunque luego la regalemos".
Con todo, se mostró "inmensamente agradecido" hacia la labor de las Caritas diocesanas, que están "desbordadísimas". "Pero hay mucha colaboración, mucho voluntariado y hay también imaginación para ayudar", afirmó.

Piris destacó la discreción de Caritas de cara a las personas a las que ayuda, detallando que las personas que se 'benefician' de sus servicios no tienen por qué estar en una base de datos. "Estamos cuidando mucho ese detalle del servicio amoroso al hermano, que se sientan bien acogidos", señaló.

Con todo, resaltó que el plan de trabajo de las Cáritas se centra en atender "todo lo que haga falta, pero sobre todo a las personas que quieren ser atendidas y dar paso en su vida". Es decir, que "si usted ha tenido la desgracia de caer en la drogadicción o del alcoholismo, y viene y quiere reinsertarse, someterse a un proceso, vamos a ayudarle; ahora, si no quiere, no se puede hacer nada más que darle de comer". "Los programas de Cáritas no van sólo a solucionar de inmediato que tengan una cama o un plato caliente, que también", abundó el ex obispo de Menorca.