El acto inaugural de la Fira del Camp tuvo lugar en el estand del Ayuntamiento de Alaior y contó con la asistencia de las autoridades locales, insulares y autonómicas. El alcalde Pau Morlà, expresó su agradecimiento por el esfuerzo del equipo municipal en la preparación de la Fira del Camp, además de destacar la organización del concurso morfológico, a cargo de la Asociación Frisona Balear, y el apoyo económico del Consell y Govern. Morlà constató el creciente éxito de participación de fincas y expositores, y definió la Fira como un espacio de diálogo y de reflexión sobre el sector agrario, además de apostar por su continuidad.
La consellera de Economia Antònia Allès aseguró que la Fira del Camp era la primera feria ganadera de las Balears, caracterizada por su ambiente festivo, aunque precisó que no debían ignorarse los problemas que afectan al sector. Abogó por sumar esfuerzos entre el sector agrario y la administración, además de recalcar el carácter estratégico del sector para el mantenimiento del paisaje insular. Allès apostó por el compromiso de toda la sociedad para salvaguardar la viabilidad del campo y animó a los ciudadanos a consumir productos autóctonos.
La consellera de Agricultura del Govern, Mercè Amer, señaló que era una jornada especial para el campo de Balears, puesto que la raza frisona era un referente en la Comunidad Autónoma. Reconoció que el sector agrario atravesaba una situación complicada, por lo que apostó por la unión entre las partes implicadas para afrontar con garantías la crisis.
El presidente del Consell, Marc Pons, reiteró la necesidad de que instituciones y payeses trabajen de forma conjunta para afrontar una coyuntura de dificultades económicas. Señaló que la Fira del Camp representaba el reconocimiento de la gente del campo y ahondó en la determinación de superar las dificultades, además de compartir los retos de futuro del sector.
Concurso morfológico
El presidente de la Asociación Frisona Balear, Andrés Seguí, expresó su satisfacción por la elevada participación de fincas en el concurso morfológico, que situó en la élite de los concursos de ámbito nacional, tanto por el nivel genético como por el manejo de los ganaderos. Seguí señaló que el concurso morfológico ha propiciado una importante evolución del ganado frisón, al pasar durante las dos últimas décadas de una media de 4.500 litros anuales por vaca a los 8.500 de la actualidad. Además, constató la necesidad de organizar estos concursos para mantener la motivación entre los profesionales del sector.
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