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Rubén P. Atienza Ciutadella
Cuando Francesc Capdevila, más conocido en el mundo del cómic como Max, se puso a pasar revista a sus diez últimos años como ilustrador, encontró un denominador común: el resultado fueron los sueños, lo fantástico, lo onírico... La exposición que iban a montar con su obra necesitaba un título, y el siempre creativo artista recurrió al griego para dar vida a una nueva palabra: sumó "hipnos" (sueño) con "topos" (lugar) y obtuvo como resultado: "Hipnotopía", una muestra que desde hoy y hasta el 23 de enero se puede visitar en la Sala de Cultura de Sa Nostra en Ciutadella.

Max (Premio Nacional de Cómic 2007) ofrece la posibilidad de realizar un repaso a sus facetas de dibujante de cómic y de ilustrador de prensa, libros y carteles. El artista señala que para los autores "es difícil ganarse la vida con los cómics, pero igual que ocurre con la literatura". Según él, el sector de las viñetas "no está sufriendo la crisis más que cualquier otro", aunque también reconoce que últimamente corren mejores tiempos. Y ello gracias al impulso que ha supuesto la irrupción en el mercado de la novela gráfica, "un calificativo que no siempre se utiliza de manera acertada", pero que "ha añadido un plus abriendo el espectro de público, ya que hasta el 2000 el cómic estaba visto como algo para adolescentes".
A lo largo de su carrera, Max ha sido un fiel de colaborador de la revista mensual "Víbora", un clásico que tristemente pasó a mejor vida en 2005. Según explica, se trata de un formato que gozó de gran auge durante los 80, "cada mes había una docena de revistas de ese tipo en el quiosco, pero perdieron el favor del público por motivos que todavía no sabemos". Luego vinieron los 90, "una travesía por el desierto en la que sólo había mangas japoneses y superhéroes americanos", hasta que actualmente son las novelas gráficas las que dominan el mercado editorial en el sector.

Prestigio
A lo largo de los años, Max se ha convertido en un reputado ilustrador a nivel internacional. Entre sus trabajos más importantes fuera de España figura el diseño de portadas para publicaciones como "The New Yorker" Magazine. También fue el encargado en 1998 de crear la mascota del centenario del FC Barcelona y diez años antes recibió el Premio Nacional de Ilustración del Libro Infantil.