Y ello es gracias a que en los últimos tiempos se está consolidando una tendencia. «Antes la gente hacía regalos y añadía un libro», pero ahora este ha ganado «mucho protagonismo» y entidad como presente por sí solo. Todo en una coyuntura en la que las ventas, más allá de la temporada actual, han mejorado en el año que acabamos de despedir.
Esa es la sensación que hay en la Isla y la que también apuntan desde el Gremi d’Editors de Catalunya, a la espera de que a finales de este mes lo corrobore la Federación de Gremios de Editores de España. Entidad esta última desde la que recuerdan que, a nivel global, las ventas navideñas (sin incluir los libros de texto) representan aproximadamente un 10 por ciento de la facturación anual. La buena noticia es que el crecimiento de ventas durante los últimos diez años ha sido sostenido (del 30 por ciento, según el informe de 2023) y todo apunta que el de 2024 sea incluso superior al del año anterior (5,1 por ciento).
Los estudios demuestran que, pese a la amenaza digital, el libro tradicional resiste muy bien. Y ello es gracias al relevo generacional entre los compradores. «En los últimos tiempos hemos comprobado que hay mucha gente joven que se ha aficionado a la lectura, un mercado que a veces era un poco difícil», explica Seguí, quien defiende el libro como una opción perfecta para el regalo por las posibilidades que ofrece. «Puedes escoger cualquier tema y con una gama de precios muy amplia, los puedes comprar hasta por menos de diez euros», destaca.
Cuando se le pregunta por el gran éxito del año en la Isla, la respuesta no se hace esperar, «El temps habitat» de Maite Salord. Con la misma rapidez responde desde vaDllibres, en Ciutadella, Dolors Boatella. El libro de la menorquina, lanzado en otoño, para la Fira del Llibre en Català, acaba de estrenar su segunda edición.
Boatella también habla de una buena campaña navideña y de un 2024 con ventas algo superiores a las del año anterior. La librera sostiene que «no es un recurso, el libro es un buen regalo, más si además va acompañado de una buena recomendación». Su receta de éxito en el negocio pasa por «hacer una selección muy cuidada, para todos los gustos y, sobre todo, para todas las edades».
El balance del pasado año sirve a la responsable de vaDllibres parea afirmar que no solo hay lectores que empujen el sector, sino también «una cultura del libro con un público muy diverso». «Por nuestra parte ponemos todo lo que podemos para que la gente no dude que donde tiene que comprar es en el comercio de proximidad», concluye.
Desde el otro lado de la Isla, Patricia Viu, al frente de Xalallibres en Maó, librería especializada en el público infantil, celebra que «a pesar de estar en la era pantallas, por suerte el libro se mantiene». Para ella la campaña de Navidad está siendo «muy buena», un dato especialmente positivo para un negocio que arriesgó abriendo sus puertas en plena pandemia. En su caso, parte del acierto es haberse decantado por un público determinado. «Ahora hacen libros preciosos para los pequeños, para los que empiezan a leer hay un montón de colecciones», relata. En lo que se refiere a los más vendidos, en su caso se llevan la palma tres títulos: «Unicornia», «Me llamo Goa» y «Escuela de Monstruos».
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Menorca - Es diari
De momento no hay comentarios.