La Banda Municipal de Música de Ciutadella y la Capella Davídica compartieron escenario el sábado por primera vez en el Socors | Kika Triay

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Existía cierta expectación por ver cómo cuajaba el proyecto conjunto entre la Capella Davídica y la Banda Municipal de Música de Ciutadella. Y a la vista de la reacción del público ante una propuesta poco habitual, parece que el resultado fue muy satisfactorio.
La Església del Socors se llenó un año más el pasado sábado para disfrutar de la jornada inaugural del tradicional concierto de Pascua que desde finales de los años 60 se organiza gracias al patrocinio de la Obra Social La Caixa.

Arrancó el concierto bajo la batuta del director de la Capella, Biel Barceló, con la composición de música funeraria de la época barroca compuesta por Henry Purcell, titulada «Music for the funeral of Queen Mary». Una pieza para coro mixto con trompetas y trombones, con Suso González al órgano.

El concierto continuó con «Et in terra pax», de Jan Van der Roost, una composición mucho más moderna y contemporánea en el que el protagonismo absoluto fue para la banda músicos dirigida por Joan Mesquida, quien se hizo cargo también de la batuta en el tramo final del concierto, el esperado momento en que la Capella y la agrupación musical, que sumaron más de un centenar de artistas, interpretaron la «Missa Brevis» de Jacob de Hann, para poner el broche final a un espléndido concierto. El ciclo continuará el próximo sábado, de nuevo en el Socors (19 horas) y el domingo en la Església de Santa Maria de Maó (20.30 horas).