Del 26 de julio al 11 de agosto, el deporte tendrá todo el protagonismo en unos Juegos marcados por la amenaza terrorista, que a 100 días de su inauguración, ha llevado al presidente francés, Emmanuel Macron, a desvelar que hay planes alternativos a la esperada y original ceremonia inaugural prevista en el río Sena, en caso de que la alerta se amplíe: Trocadero o el estadio de Saint Denis son las otras cartas que maneja un comité organizador preocupado por la seguridad en una ciudad que ha ofrecido precedentes peligrosos en grandes eventos, a lo que se suma un momento de enorme tensión internacional. La idea inicial es llevar a cabo la primera ceremonia fuera de un estadio, marcando un hito dentro de la historia olímpica en unos Juegos sin Rusia y a la espera de hipotéticos boicots y ver cómo evoluciona el panorama geopolítico.
Si los planes son los previstos, la revolucionaria ceremonia inaugural recorrerá el Sena a lo largo de 6 kilómetros, con 160 embarcaciones y 10.500 atletas en liza en un evento que llegará a mil millones de espectadores a lo largo y ancho del planeta, que pondrá sus ojos en París, que lucirá algunos de sus lugares más emblemáticos como escenarios de varias de las competiciones.
La cita de París 2024 irá más allá de la capital francesa, abarcando numerosas ciudades del país vecino como Marsella, Niza, Nantes, Burdeos o Sain Etienne, entre otras, hasta totalizar 35 escenarios. Además, ofrecerá la subsede más alejada de toda la historia. Tahití, en la Polinesia, será el escenario de las competiciones de surf, uno de los deportes que ha irrumpido en un programa que incorporará otra modalidad como el break dance (breaking) como aliciente para ese nuevo perfil de público que se persigue.
Los Juegos vuelven a Europa doce años después en una cita marcada en rojo para el deporte español, que vuelve a depositar sus ilusiones en el reto de superar o igualar las 22 medallas de Barcelona 92, o al menos mejorar la marca de 17 metales de Río y Tokio, en un momento que marca un punto de inflexión, con la entrada y consolidación de nuevos valores, unido al fin de ciclo de una generación dorada que estaría ante su última participación.
María Pérez, Álvaro Martín (atletismo, marcha), las selecciones de waterpolo, baloncesto y fútbol, la vela en clases como el 470 Mixto, el 49er o el 49erFX, el taekwondo, el tiro, el balonmano o las embarcaciones de piragüismo están en las posiciones de privilegio en la carrera por las medallas, con nombres propios como Alberto Ginés (escalada), Hugo González de Oliveira (natación), Carlos Alcaraz (tenis), Maialen Chorraut (piragüismo, aguas bravas), Carolina Marín (badminton) o Jon Rahm (golf), a la espera de saber si Rafael Nadal participa y si se clasifican bazas como el equipo masculino de baloncesto y la nadadora Mireia Belmonte.
El marco monumental de París es el mejor escaparate para el mayor acontecimiento del verano y, probablemente, del año. La venta de entradas y la expectación generada, además de la proximidad geográfica y el regreso del público a las competiciones son algunos de los alicientes que reúne esta edición, que para deportes como el fútbol o el rugby 7 comenzará dos días antes del señalado 26 de julio.
En total, habrá 32 deportes en liza y un total de 329 eventos de medalla, siendo el que más reparta la natación, con hasta 49 pruebas diferentes en las modalidades de aguas abiertas, waterpolo, artística, saltos o natación pura. El atletismo, con 48, es el siguiente dentro de esta lista en unos Juegos que contarán con 45.000 voluntarios y venderá cerca de un millón de entradas.
Pendientes de amenazas externas, pero con la maquinaria ya en marcha, la cuenta atrás hacia los Juegos Olímpicos de París 2024 se ha lanzado definitivamente, toda vez que la llama ya ha prendido en Olimpica y viajará rumbo a Marsella para iniciar su trayecto final hasta la capital francesa, donde llegará en la noche del ya señalado 26 de julio.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Menorca - Es diari
De momento no hay comentarios.