Felicidad máxima por parte del conductor, Santi Salord, tras rebasar esta cifra en Torre del Ram | S.S.A.

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Poco, o nada, se habría imaginado un joven ‘jockey' de Ciutadella llamado Santi Salord Allès aquel 30 de mayo del 1993 y cuando corrió su primera carrera oficial de trote en el Hipòdrom Torre del Ram de Ciutadella que estos pasados días– 30 años después de aquel estreno en Ciutadella–, lograría superar las 500 victorias en el mundo del trote. Aquel 1993 Salord tenía la edad de trece años, todavía con licencia de aprendiz, y compitió en Cala en Blanes con Danzarín, un caballo de propiedad de Toni ‘Tinga'. Y desde entonces, Salord, descendiente de una familia muy estrechamente vinculada desde su arranque a Torre del Ram, no ha parado de ganar, siendo precisamente este 2023, uno de los mejores años, con 56 victorias hasta el momento, promediando durante muchas temporadas, entre las 39/48.

Santi Salord compartía este martes con «Es Diari» su satisfacción por los 500 logros, logrados desde sus cuadras, con ejemplares «criados por nosotros y comprados para competir. Mi padre siempre me dio consejos y yo los he ido aplicando. Y sobre todo también aprendiendo a base de observar a los mejores ‘jockeys'», explica, a la hora de razonar sus éxitos y hasta cierto punto sorprendido, 30 años después. «Cuando empiezas un deporte y tienes esa ilusión de ser uno de los mejores los principios son difíciles pero del buen trabajo se saca un buen resultado», señala, después de «muchas horas dedicadas para llegar a las 500 victorias», dice, acumulando, a parte, 384 segundas posiciones y 334 terceras posiciones, en un total de 2.650 carreras disputadas a finales de octubre y compitiendo siempre cada sábado en Ciutadella y los domingos, en Maó. «A Mallorca vamos poco porque cuesta mucho el barco y no tenemos ayudas. Costara poco iríamos cada semana porque los premios son más altos que aquí», admite Salord, quien incluso estuvo cuatro 4 años en Italia trabajando en la Scuderia Ehlert, junto a uno de los mejores entrenadores de caballos de carreras del mundo. «¿Competir fuera? Si algún día tengo la suerte de tener un caballo para poder hacerlo, como Trébol, sí iré», advierte el ciutadellenc, que él mismo se define como un ‘jockey', «con experiencia. Se trata de conocer bien a mis adversarios con sus caballos, saber el límite de mi caballo para no desgastar energía y llegar con fuerzas al final de la carrera», analiza, «muy feliz disfrutando de este deporte y súper contento de estar en las primeras posiciones del ranking disputando por el oro de Balears».

Ambicioso, se pone nuevos retos. «Siempre me pongo objetivos y el próximo es ganar un Gran Premio Nacional con una potra mía», avisa, analizando el momento del trote. «Futuro hay, si salen nuevos futuros ‘jockeys' en Ciutadella y Maó, con ilusión, desde el Mini trote de niños», piensa, hablando, en concreto, de Torre del Ram. «Podría ir mucho mejor de como va. Evidentemente que tendría que ser del Ayuntamiento y poder disfrutar del hipódromo con actividades escolares», piensa en voz alta.