Se acabó. El Ferre volvió a luchar como siempre pero su empate resultó ser insuficiente en la tabla - Gemma Andreu

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A menudo lo que parece es. Puede tardar más o puede tardar menos. Puedes hacer un último esfuerzo. Soñar que logras revertir una mala situación. Pero si la dinámica te empuja, si cuesta tanto, acaba ocurriendo lo más lógico aunque el mundo del deporte esté lleno de épicas de todos los colores.

Ayer en Sant Bartomeu hubo un enésimo ejercicio de resistencia. El Ferre volvió a ir a remolque, tuvo que superar un 0-2 en contra ante un ordenado y necesitado Atlético Isleño para acabar empatando a dos goles (2-2), con dos expulsados en el tramo final y cierta sensación de que con la lucha sólo no basta.

Si el algodón no engaña y las matemáticas tampoco, el descenso se aplaza una semana. Ayer también, el equipo que marca la salvación, el Ferriolense, perdió 3-1 ante el Felanitx. Es decir, que se queda con 31 puntos. El Ferre suma 23. Es un -8 y quedan 9 por jugarse. Si el Ferriolense gana y el Ferre no, ya estará. Y, en cualquier caso, es cuestión de tres jornadas.

¿El partido? Si estás tocado y en el minuto 6 encajas el primer gol todo se hace muy complicado. El Isleño, con cuatro cosas, con un poco de orden y dándole el esférico a sus peloteros Antonio (dos goles), a Álex y a 'Drogba' Paolo, tenía bastante para ir tirando.

¿Saben cuantos minutos tardó el equipo de Andújar en tirar a portería? 26. Fue una falta que tiró con fuerza Pepo y se le fue por un costado. Veinte minutos antes Antonio había marcado el 0-1 rematando un centro en el segundo palo. También el visitante Álex se zafó muy técnicamente del portero Moll. Superado, vio como su tiro se estrellaba en el exterior del palo.

Fue a partir de la media hora cuando el Ferre mostró algo más arriba, fundamentalmente con una serie de córners que inquietaron algo la puerta visitante.

Tras el descanso, lo mismo. El Isleño volvió a empezar con gol. Y además olímpico. En un córner, Antonio se volvió a lucir. Lo sacó y entró directo para el 0-2.

Caían los minutos. Seguía el esfuerzo, algo que nadie puede discutir en absoluto. Estos chicos han sudado todos los minutos de todos los partidos. Pero no hay más. En la grada, los pocos aficionados proseguían un "run run" de comentarios. Alguno hiriente. "Juegan como entrenan", dijo alguno. "¿Qué dirá hoy el entrenador?", inquiría otro.

Andújar no seguirá. Su más que posible sustituto, Pere Vadell, estaba en Sant Bartomeu. Cuando se haga el balance, quien corresponda hará la suma y la resta y valorará el total. El equipo está descendido en un año "horribilis" a nivel de club, tanto en Regional como en juvenil. Son muchas cosas juntas, pero todas esas cosas juntas no deben hacer perder la perspectiva ni la calma.

¿El partido? Pasaban los minutos y el Isleño parecía algo conformista mientras el Ferre poco a poco se iba acercando. Ahí llegó el gol de Omar. El blaugrana ha estado fuera desde Noviembre pasado. Ayer volvía y marcaba el 1-2 en el 73, aprovechando un despiste de la defensa blanca. Ese tanto llevó la inquietud. Tanta, que en una falta lateral Tomeu marcó el 2-2. En el 75. Un defensa tocó el balón y era penalty, pero el rechace le llegó a Tomeu y lo aprovechó.

Entonces al Isleño le vinieron las prisas... Aunque el empate tampoco le solucionaba nada al Ferre y se envalentonó. Llegaron los piques -Isaac y Xavi acabaron expulsados- y varias ocasiones, como un palo del Isleño en una falta de Antonio. Pero el partido finalizó con los jugadores protestando. Al árbitro y a todo lo que se movía que no tuviera el mismo color de su camiseta. Todo tenía sensación de final cercano. De final de etapa. De descenso próximo..