Cristian. El meta del Mercadal consiguió detener la pena máxima en el minuto 69 que valió un punto para su equipo - Javier

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No pudo el Mercadal con el Collerense y se dejó dos puntos en su feudo (0-0) después de un choque muy igualado que tanto pudo caer de un lado como del otro. Tuvo más ocasiones el Mercadal, pero no excesivamente claras, mientras que sí lo fue la del Collerense en el minuto 69 de partido gracias a un penalti por manos de Sam en el área local. Pero entonces surgió la felina agilidad de Cristian para parar el lanzamiento del veterano Espadas, bajo y a la derecha del meta, salvando no sólo el gol sino también el casi seguro destino del partido a favor del conjunto mallorquín.

Después de un inicio de hostilidades esperanzador con un susto a cargo de Robertito y un buen pase de Mario a Lacueva que no pudo concretar por la rápida salida de Juanjo, el encuentro fue de más a menos. El Mercadal se rompía en la línea de medios que robaba muchos balones, pero no acertaba en la transición hacia los hombres de delante, demasiado desasistidos, mientras el Collerense mostraba buenas maneras, sobre todo fortaleza defensiva, pero tampoco lograba inquietar a Cristian.

En la parte final del período se vio lo mejor del mismo, en el minuto 30 Mario protagonizaba la mejor ocasión local, pero Juanjo desvió "in extremis" su remate. En el 36, Adrí vio adelantado a Cristian y desde medio campo intentó sorprenderle sin resultado. En el 41 tremenda volea de Camacho que como mal menor rebotó en un defensa del Mercadal, y en el 45 una genial jugada de Gaimundi salvando contrarios se estrelló en el último obstáculo.

Tras una anodina reanudación del juego, el Mercadal tuvo cinco minutos de genio y acoso que parecía iban a darle la manija del partido, pero ni Berto (51'), ni Jandro (52'), ni Lacueva (53' y 55') tuvieron suerte en sus ocasiones. Un gol hubiera derrumbado seguramente la férrea defensiva mallorquina en los mejores momentos del Mercadal, pero al no ser así todo quedó al albur de las idas y venidas de un área a otra, y la moneda cayó del lado del Collerense con el penalti que en un alarde de reflejos detuvo Cristian.

Este fue el momento álgido del partido, porque los minutos finales solo pusieron a prueba los nervios de los dos equipos. Ambos sumaban un punto, pero lo intentaron hasta el último instante con más corazón que cabeza y sin resultados positivos. En definitiva, un empate justo en Sant Martí que sigue sin ver al mejor Mercadal, aunque sume los mismos puntos que el año pasado por estas fechas.