El entrenador del Menorca, Paco Olmos, reclamó ayer a la afición menorquina que reciba con "calor" la vuelta de su equipo a la categoría más alta del baloncesto español. El preparador recordó el ambiente que se vivió en el Pavelló Menorca durante el play off de ascenso contra el Burgos cuando, recordó, en el Pavelló "no cabía ni un alma. Toda esa gente quería ver a su equipo en la ACB", subrayó. Y ahí está.
Precisamente el hecho de jugar en su propia cancha es la ventaja que el valenciano quiere explotar ante el Blancos de Rueda, un rival que, según Olmos, supera a los suyos en varios puntos. Destacó que es un bloque "con experiencia", que tiene un juego "muy asumido", dado que "han cambiado muy pocas fichas" respecto al año pasado, lo cual lo convierte en un conjunto "muy sólido y ordenado".
En un análisis más detallado, el responsable del equipo menorquinista recalcó que los pucelanos cuentan con "un juego de campo abierto, en transición o contraataque que convierte su perímetro en muy peligroso en todas las posiciones". También se refirió a la pareja interior formada por Barnes y Báez.
Olmos calificó la pretemporada del equipo pucelano como de "excelente", no en vano han conseguido cinco victorias en seis partidos, en uno de los cuales los castellanos derrotaron al Menorca, aunque pidió "no magnificar" los resultados veraniegos. No se olvidó de la labor del entrenador, Porfirio Fisac, del que dijo que "sabe sacar lo mejor de sus plantillas".
"Muchos jugadores debutarán en la ACB", recordó el técnico, que añadió que será un día "especial" para su equipo. Olmos declaró que "después de seis semanas de trabajo", el equipo está "con ganas" de que llegue la primera jornada. El valenciano subrayó que quiere "empezar bien" porque, asegura, "éste es un partido muy importante". Se espera que el Blancos de Rueda sea un rival directo por la permanencia en la categoría y el entrenador no se olvida de la importancia que puede llegar a tener el basket-average entre ambos conjuntos al final de la temporada.
Todos a punto
En cuanto a los tres jugadores que han padecido últimamente problemas físicos, Jakim Donaldson, Urko Otegi e Iván Radenovic, el preparador valenciano reveló que todos ellos se han incorporado ya a los entrenamientos y, aunque dijo que "decir que están al cien por cien sería mentir", los tendrá a todos ellos a su disposición para disputar el partido del domingo. Olmos confesó que es consciente de que cuenta con "una plantilla corta", por lo que, asumió, "cualquier contratiempo trastoca nuestros planes de trabajo".
A pesar de todo, salvo que surja un contratiempo de última hora, el equipo afrontará la primera jornada sin ninguna baja. El Menorca realizará su último entrenamiento hoy de 11 a 12 horas, mientras que el Blancos de Rueda se ejercitará de 19 a 20 horas de la tarde.
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