Sobre un jugador extremadamente joven pero poseedor de un enorme talento va a descansar buena parte de la dirección de juego del nuevo Menorca Bàsquet ACB. El club mahonés confirmó ayer la incorporación de Micki Servera a su proyecto, al que llega en calidad de cedido por su club de origen, el Unicaja de Málaga.
Servera, mallorquín de 18 años, compartirá minutos en pista con Diego Ciorciari, que partirá como base titular en el equipo de Paco Olmos. Tanto el técnico valenciano como el director general de la entidad, Oriol Humet, han considerado que Servera, pese a su corta edad, está ya preparado para que su evidente progresión le permita ganar presencia e importancia en la primera liga europea y, quién sabe, si convertirse en una de las revelaciones del campeonato. Se trata de una apuesta que puede parecer arriesga dada la falta de experiencia del joven mallorquín y considerando que el bagaje de Ciorciari en la ACB son 27 partidos en la temporada 2004-05, en las filas del Bilbao. Pero no es menos cierto que Servera apunta alto en el baloncesto español por sus cualidades técnicas y físicas. El mallorquín está próximo a los 2 metros (1,97) por lo que será uno de los bases más altos de la Liga, lo que no le impide hacer gala de un excelente manejo de balón y una notable lectura del juego.
Servera se formó en el San José Obrero de Palma antes de pasar por el Centro de Tecnificació del Govern Balear. Con 16 años ya disputó diez partidos en el Bàsquet Mallorca de LEB Oro y la pasada campaña se incorporó al Clínicas Rincón, de la misma categoría, vinculado al Unicaja de Málaga, todavía en edad junior, que es el club propietario de sus derechos. En el filial malacitano ha disputado 33 partidos con 16,5 minutos en cancha en los que ha anotado 5,9 puntos, repartido en 1,4 asistencias para una valoración media de 4,1 puntos.
"Técnicamente es muy bueno y en el uno contra uno está un paso por delante de su generación", explica Juan Antonio Orenga, que ha sido uno de sus entrenadores en las Selecciones Españoles inferiores. El ex internacional destaca como punto flaco de Servera que "le cuesta manejar un poquito el tempo del partido". Orenga añade que "en ataque marca diferencias, puede anotar siempre. Ahora lo que tiene que hacer es jugar, que el entrenador sepa manejarle y exigirle, para que no se conforme con lo que tiene".
Con la llegada de Servera el Menorca Bàsquet 2010-11 ya cuenta con ocho jugadores, es decir, los bases Ciorciari y el propio Servera, los escoltas, Huertas y Limonad, los aleros Victor y Diego Sánchez, y los pívots Donaldson y Urko Otegi. Falta por tanto la contratación de los dos pívots. Uno de los elegidos es Iván Radenovic, en el caso que acepte la propuesta. Dado que el serbio no es un '5' nato el club busca otro center y una opción es renovar a Caio Torres.
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