Alegría. El CE Alaior se impuso ante el Arenal con un triunfo aplastante - Archivo
El CE Alaior pasó como un ciclón por el Municipal de Son Verí y no falló en su lucha por conseguir la permanencia matemática un año más en la Tercera División Balear. Lo consiguió gracias a la victoria y al tropiezo del Independiente en su feudo ante el Ferriolense (0-0). El equipo de Joaquín Andújar se impuso como lo hacen los equipos grandes, con lucha, ambición, superioridad y una buena dosis de efectividad. También es cierto que el Arenal, ya salvado, saltó al campo sin sus dos centrales fijos, Silvano y Chaparro -éste último, lesionado de gravedad, recibió un homenaje por parte de sus compañeros- y la motivación extra que suelen implicar encuentros de este calibre a estas alturas de temporada. El plantel albinegro salió muy enchufado ante un relajado Arenal. El juego a balón parado fue lo mejor de un CE Alaior que a los 41 minutos de juego ya dominaba el marcador por 0-3 gracias a los tantos obtenidos por Marqués, Jordi Perea y Calero. Durante el primer tiempo, el CE Alaior tomó las riendas del partido frente a un Arenal que apenas ofreció peligro en las inmediaciones del área alaiorense. Tras el descanso, la maquinaria albinegra no bajó los brazos y tradujo toda su ambición en goles. Enrich, con un zurdazo desde fuera del área puso el 0-4. Aunque el mejor gol lo dibujó Aitor. Tras sortear a diversos adversarios puso el quinto. El joven jugador del CE Alaior fue una de las sensaciones del partido llegando a maravillar con su juego. El propio jugador estableció el 0-6 y el gol honorífico del Arenal lo materializó Peke en el minuto 83.
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