partidazo. El equipo de Fiorenza aspira a repetir su gran actuación del domingo, ahora en Burgos - Cris

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Desde Burgos a Tenerife, directos, sin pasar por Menorca. Ese es el propósito con el que sale de la Isla esta mañana el Valeriano Allés Menorca Volei con dirección a la capital castellana donde mañana miércoles se juega, por primera vez en su historia, el pase a la final de la Superliga femenina en el partido de desempate frente a las burgalesas.

En previsión a una victoria, el club que preside Cati Moll se ha visto obligado a planificar dos viajes, uno de regreso a la Isla el jueves en caso de que caiga derrotado en Burgos. Y otro, con destino directo a Tenerife, vía Madrid, el jueves por la mañana. Esto es así porque el calendario del play-off marca que los dos primeros partidos de la final se juegan los días 24 y 25 de abril (sábado y domingo) en la cancha del primer clasificado, el Jamper Aguere, brillante campeón de la fase regular y ahora candidato al título de Liga. Si gana en Burgos el Valeriano no regresaría a Menorca hasta el lunes por la noche.

El cansancio físico del grupo que adiestra Adrián Fiorenza queda mitigado por el subidón de adrenalina que tuvieron las jugadoras el domingo ante su afición, traducido en un triunfo aplastante frente al Burgos que igualaba la eliminatoria.

El equipo se entrenó suavemente ayer tarde, hoy viaja a Burgos, vía Madrid si no hay nuevos cierres de aeropuertos y mañana por la mañana se entrenará en el pabellón de El Plantío. El partido dará comienzo a las 20:30 horas. No espera una encerrona especial el Valeriano Allés en Burgos, aunque sí una presión similar a la que ejerció el público de Ciutadella este pasado domingo. Aparentemente el equipo local puede acusar una mayor presión por haber perdido los dos partidos en la Isla, aunque en este play off ha quedado clara la importancia del factor pista puesto que ambos equipos han ganado sus dos partidos al amparo de su gente. "Creemos que esta vez se van a centrar más en apoyar a las suyas que en meterse con nosotros", explica el director técnico del CV Ciutadella, Bep Llorens.