Cegados. El Mercadal no vio el fútbol con la claridad que le caracteriza. En la imagen, Lacueva en acción - Cris

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En un flojo partido por ambas partes, Mercadal y Poblense empataron a dos goles ayer tarde en Sant Martí. Los de Yeray no encontraron la inspiración necesaria para imponerse al cuadro mallorquín, en especial en una irreconocible primera parte en la que nunca lograron coger el timón de la situación.

Tampoco es que el Poblense hiciera mucho, pero a ellos les iba bien un partido indefinido y con escasas ocasiones, y mucho más aún cuando a tres minutos del descanso Vargas conseguía inaugurar el marcador tras un córner aprovechado por el central azulgrana para rematar de forma inapelable a la red.

El gol fue un premio excesivo para el Poblense, que se limitó a poner en la balanza el oficio de sus jugadores, pero mayor fue el bofetón para un Mercadal que había malgastado la mitad del partido en un ir y venir sin rumbo. A destacar la sorpresa de la alineación inicial del juvenil Jesús García que ya debutó en Ciutadella y que jugó en casa sus primeros 45 minutos. Mostró rapidez y ganas, y no desentonó dentro del conjunto.

Como era de prever hubo cambios tras el descanso, entraron Berto Vaquero y Chupi por Biel y Jesús, y enseguida se puso en faena Vaquero con un tiro de falta que paró Gost. Pero dos minutos después volvió el ciudadelano a disponer de un tiro libre y ahora si que no falló. Su remate perfectamente calculado encontró vía libre hasta la red.

Se animó el equipo, se volcó el público y Berto lanzó otra falta que Gost tuvo que desviar a córner. Y en los mejores minutos locales llegó el desempate. Nuevamente el revulsivo Vaquero surtió efecto, lanzó con temple la enésima falta y Sam entrando con fuerza y decisión cabeceó a la red.

Ahora sí que el Mercadal se parecía mucho más a si mismo, y en los próximos minutos tuvo en las botas de Lacueva dos grandes ocasiones para deshacerse definitivamente del Poblense. En el minuto 68 una errónea cesión de la defensa a Gost la interceptó Javi, pero le pudo el ansia del gol y su remate a puerta vacía salió finalmente fuera. Y en el 70, remató a la media vuelta en buenísima posición y otra vez el balón salió rozando el poste.

En estos momentos, los mejores del encuentro, tuvo el Mercadal la victoria a su alcance, pero se hizo bueno el dicho de que quien perdona paga al final, y así fue, porque en el 78 en otro saque a balón parado Vargas lograba el empate y su segundo gol al bombear de cabeza el esférico sobre Cristián. Jarro de agua fría que se convirtió en indignación un minuto después cuando Lacueva fue objeto de un aparatoso empujón en el área visitante que el árbitro o no vio o no lo consideró punible, pero que fue ya el golpe final a las ilusiones del conjunto rojiblanco, porque aunque todavía quedaban minutos para el final, faltaron esta vez a la cita el acierto y la fe que en otras ocasiones fueron claves en heroicas remontadas.

"El equipo debería devolver el dinero de la entrada"
Contrariado por el juego de su equipo se mostró el entrenador, Yerai Rodríguez, quien incluso indicó que "el equipo debería devolver el dinero al aficionado. Hemos jugado muy mal tanto ellos como nosotros con los cuatro goles a balón parado".

Abundó Yerai en referencia a sus jugadores que "a alguno se le ha subido a la cabeza la clasificación o ya piensa que ha subido a Segunda B y se puede ganar sólo con la camiseta. Cada semana que se habla de play off hacemos el ridículo y hoy casi. Primero hay que saber competir y venir a entrenar con actitud, pero si seguimos así no sumaremos ningún punto más".

Yerai se lamentó porque ni intentamos buscar el tercero, no lo merecíamos, salvo por jugada aislada. No dimos cuatro pases seguidos en todo el partido y así no se puede ganar un partido en Tercera". En todo caso dio el punto por bueno".