El Menorca tiró de épica, de garra, de esfuerzo físico encomiable para sumar la primera victoria de curso. Y lo hizo ante el mejor rival que ha pasado y pasará -Barça aparte- por Maó en una cita con muchos obstáculos a superar. Los azulgranas tras ponerse por delante, vieron como en dos minutos, el Roda volteó el marcador, pero no se vinieron abajo y en un tramo final delirante, donde los visitantes tuvieron la puntilla, remontaron para agarrar un triunfo que les engancha a la liga. Tres puntos cargados de sudor, sangre, la que se dejó Maldonado, y dientes, los afectados de Biel tras el tremendo encontronazo entre ambos futbolistas en un balón dividido.
Acierto
El arranque dibujó un escenario que se preveía. El Roda, con el balón al pie, sin rifarlo, y los de Romero intentando presionar, sin éxito, la salida visitante. La tremenda calidad que exhibió el filial del Villarreal le permitió salir airoso de las garras locales y mostrar su juego preciso y precioso buscando alternativas en las bandas. Pero el Menorca fue el primero que golpeó cuando Martínez cabeceó a la salida de un córner lejos de Ximo. Luego llegó el aparatoso y violento choque entre Biel y Maldonado que tuvo el encuentro parado por espacio de cuatro minutos.
El Menorca se guarneció con las líneas muy juntas y dejando a Ricky arriba en solitario ante el dominio del Roda que fue abrumador y creando claras situaciones de peligro sobre el marco de Fernando que inició su recital de intervenciones, una de ellas tocando luego el cuero en el travesaño (34') o con la colaboración de sus compañeros de la zaga. El Roda solo permitió una ocasión al Menorca, cuando Ricky ganó un balón a los centrales pero su tiro lo atajó Ximo (41'), muy seguro con el cuero en los pies. En el añadido, una acción por banda de Juan López la puso al corazón del área pero el remate de Simón, obstaculizado por Biel, se fue arriba.
El inicio tras el paso por vestuarios no fue alentador. El debutante Santi tuvo que retirarse por un pinchazo y Romero reorganizó el equipo dando entrada a Iborra. Martí también movió ficha buscando soluciones ofensivas. El Roda seguía mandando aunque el trabajo del Menorca no le permitió generar ocasiones. La entrada de Alberto formó una dupla letal con Alfonso por la izquierda por donde llegó la igualada.
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