"Mínimo jugaré en Segunda B"

"Creo que puedo jugar mínimo en Segunda B y esta es mi intención", afirma sin dudar el jugador de Maó, que se desvinculaba del Mallorca el 30 de junio, después que el club no hiciera efectiva la cláusula para fichar por el primer equipo bermellón. Números en mano, "algo habré hecho bien en estos años. Supongo que debe significar que valgo para esta categoría. Se trata de encontrar un equipo que confíe en mi y yo responderé como esperen".

Capó no pierde el tiempo. Mientras resuelve el futuro balompédico, ha finalizado un curso de técnico en comunicación y periodismo deportivo, su otra pasión. Y pese a vivir dos descensos consecutivos con los filiales del Celta y el Mallorca, el mediocentro asegura que "de toda experiencia se pueden sacar valores positivos. Tienes que saberlo afrontar y no hundirte, porque siempre tienes que rendir cuanto se espera de ti".

Pedro Capó ha sido el 'ojo derecho' de Miquel Soler este último curso y del que sólo puede hablar bien, "nos hemos entendido muy bien y me ha demostrado una absoluta confianza. Excepto de central y de lateral izquierdo, he actuado en cualquier posición. Eso sí, el entrenador siempre me lo ha consultado. Me ha hecho sentir cómodo e importante para rendir siempre al máximo nivel. La confianza que me ha otorgado me ha permitido actuar en cualquiera de las posiciones, que he asimilado bien tácticamente para suplir otras carencias".

Equipos no le faltarán a Pedro Capó en los próximos días, aunque a sus oídos sólo ha llegado a modo de rumor el interés del Atlètic Balears, pero nada en concreto. Su entorno augura que tendrá opciones suficientes para elegir y que la clave está en acertar la plaza para reforzar su evolución.