"La gente puede imaginarse cuanto nos gusta el fútbol como profesión, porque de otro modo haría tiempo que habríamos abandonado y haríamos otra cosa para vivir". Son palabras de Luis Elcacho, el técnico catalán del Sporting Mahonés, comprensivo con su presidente, Paco Segarra, que se ha dado de bruces con una nueva realidad angustiosa a las primeras de cambio, producto de la delicadísima situación económica de la entidad que salpica a sus proveedores y, muy directamente, a la plantilla profesional.
Y es que llueve sobre mojado para muchos de los integrantes del vestuario que sólo han podido percibir algo menos de la mitad de la primera nómina de agosto. Son jornaleros del fútbol modesto en muchos casos que vienen de otros clubes, la campaña anterior, con los que acabaron en el juzgado tras meses y meses de impagos. "Así está el mundo y no nos queda otra que aceptarlo aunque es durísimo; el único sitio en el que consigo olvidarme de toda esta situación es en el terreno de juego cuando entreno y en los partidos. O sea que quizás la solución sea entrenar 24 horas", afirma el ilerdense poniéndole al mal tiempo buena cara.
Elcacho habla claro y, aún con la precariedad que le rodea, su mirada -perjudicada por una inoportuna conjuntivitis- destila ilusión por el proyecto que tiene entre manos aunque sabe que si el equipo sigue sin cobrar el castillo de naipes puede venirse abajo irremediablemente.
Usted dijo hace dos meses que había equipo para luchar por el play-off...
Lo dije y lo creo así porque hasta ahora nadie ha sido muy superior a nosotros salvo algún momento puntual, en cambio nosotros sí hemos sido mejores en muchas fases. Si el entorno nos ayuda un poco y los jugadores tienen la concentración necesaria podemos pelear por estar entre los de la cabeza.
Nueve puntos en siete partidos, el equipo es lo mejor que tiene el club ahora, ¿no?
Sí, las primeras jornadas en Segunda B no son una referencia clara, no hay que mirar la clasificación porque apenas hay diferencias entre el play-off y el descenso. Estamos bien colocados, especialmente, después de la pretemporada que vivimos con tan poca competitividad.
Extraña la suplencia del fichaje más importante, Biel Medina, ¿por qué?
A nosotros también nos extraña pero Biel ha tenido una pretemporada complicada por sus problemas en la espalda que aún no han desaparecido. Estamos en un periodo para recuperarlo totalmente evitando una recaída, por eso estamos convencidos que será uno de los puntales de la Liga porque es un profesional íntegro y trabaja a destajo.
¿Ha superado el enfado por la primera parte ante el Ontinyent?
Sí, con los jugadores sacamos la conclusión de las carencias de concentración que tuvimos en esa parte. Pero ahora ya sólo pensamos en el Baleares; las derrotas te enseñan mucho. ¿El rival del domingo?, es uno de los favoritos, posiblemente tiene el presupuesto más elevado de la Liga pero en el campo no está pasando por encima de nadie. Estoy seguro que habrá partido y tendremos nuestras opciones".
La falta de concentración a la que alude usted está directamente relacionada con los impagos de casi todo agosto y septiembre como parece inevitable
Posiblemente sí, pero hemos pedido a los jugadores que cuando lleguen al campo a entrenar o jugar sólo piensen en el trabajo y no hablen de la situación que tenemos. Nuestra única forma de ayudar al club es estar lo más arriba posible en la tabla. Comprendo que es difícil abstraerse cuando no tienes ingresos para pagar la hipoteca o la comida, pero es que no hay más remedio.
El presidente se reunió con ustedes hace dos semanas, ¿qué les dijo?
Nos pidió paciencia y comprensión, y la tenemos. Esta semana se comprometió a decirnos algo nuevo y a intentar cumplir unos míninos con nosotros. Tengo muy claro que si esto se ha de arreglar lo tiene que hacer Paco Segarra. Haremos lo posible por aguantar pero si se prolonga mucho no sé que pasará. Yo estaré siempre al lado de los jugadores porque soy uno más y todos vamos juntos.
Usted firmó dos años con el Sporting hace apenas tres meses. Nunca habría imaginado estar así nada más empezar la Liga, ¿no?
Sí, estoy sorprendido pero el primer sorprendido es el propio Paco Segarra. Le he visto la cara y me lo creo porque sé que su preocupació somos nosotros. No nos queda más remedio que mirar adelante y esperar que sus gestiones den frutos. El otro día hicimos una lectura con los jugadores para mentalizarnos de que los problemas que tenemos, si deportivamente el equipo va bien, nos parecerán inferiores y en eso estamos.
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