Lacueva. El jugador mahonés dispuso de una ocasión inmejorable para empatar poco después del 1-0 - Archivo

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El CE Mercadal regresó de vacío de su visita a Campos (3-0) a pesar de cuajar un buen partido, en el que únicamente la falta de puntería y el mayor acierto del equipo de Miquel Àngel Tomàs les privó de obtener un resultado positivo.

A pesar del marcador, algo excesivo a tenor de lo sucedido durante los noventa minutos, el grupo de Yeray Rodríguez ofreció una buena imagen.

El comienzo de partido fue excelente, con un Campos muy activo y un CE Mercadal que quería demostrar que no había venido a hacer turismo.

Los locales golpearon muy pronto y a los cinco minutos Nigorra anotó el 1-0 de certero cabezazo, a la salida de un córner, ante el que nada pudo hacer Cristian.

El gol hizo reaccionar ligeramente a los menorquines, que estiraron las líneas aunque en sus escasas jugadas de ataque adolecían de contundencia en los metros finales. Aún así, al cuarto de hora, Lacueva conectó un remate de cabeza que salió lamiendo el larguero de un seguro Sebastià.

Con ese decorado, superioridad del Campos aunque sin ocasiones de peligro, fueron pasando los minutos hasta que el CE Mercadal dispuso de una nueva ocasión para irse al descanso con empate pero Héctor la desperdició al disparar flojito a las manos del portero.

El inicio del segundo tiempo fue un calco de la primera mitad, con un Campos decidido a dar el golpe de gracia y un CE Mercadal que no quería tirar el partido sino sorprender a su rival. A punto estuvo de conseguirlo a los cinco minutos de la reanudación en un grave error de la zaga local pero Robert no llegó a la pelota por escaso centímetros, con todo a favor. Esta acción enrabietó a los locales y Toni Vidal, dos minutos más tarde, se sacó un remate en parábola que sorprendió a un adelantado Cristian.

El cansancio empezó a pasar factura y los sistemas comenzaron a fallar y aunque los de Yeray Rodríguez se mostraban decididos a maquillar el resultado, fue el debutante Dani Rado el que marcó para los campaners al culminar una contra.

A pesar del resultado final, gustó la actitud del conjunto menorquín, que nunca entregó la cuchara antes de tiempo e incluso creó algunas jugadas que podían haber acabado en gol perfectamente.