Gordillo. El jugador del Villacarlos trata de alcanzar un balón en el partido de ayer en Muro - N.R.

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A las primeras de cambio el At. Villacarlos vio como sus opciones de pelear por el ascenso a Tercera División se reducían al máximo. Fue así porque el campeón menorquín se vio desbordado por un rival superior, el Murense, que acabó endosándole un 4-0 demoledor.

Levantar ese tanteo adverso el próximo sábado en Es Castell, visto lo de ayer, parece una cuestión demasiado complicada. El calor reinante hizo que los de Víctor Pérez, nunca se sintieran cómodos en el campo.

Sólo los primeros 15 minutos tuvieron un dominio alterno pero tras el 1-0, obra de Mendoza, de fuerte disparo desde fuera del área, el Murense tomó las riendas del partido y lo dominó por completo pese a los intentos villacarlinos cuyas llegadas murieron siempre en la zaga local.

El equipo de Roberto Cuesta pudo ampliar el marcador en la primera parte con varias ocasiones claras. Mendoza había enviado un disparo lejano al larguero antes del primer gol, y antes del descanso el árbitro dejó sin sanción un posible penalty de Calet a Joan Pons.

En la segunda parte con 1-0 en el marcador el Villacarlos pudo haber obtenido el empate en la que fue, prácticamente, su única ocasión clara en todo el partido. Una falta directa lanzada por Pedro que el meta local, con apuros, despejó a córner.

El control del partido continuaba siendo del Murense que al cuarto de hora de la segunda parte ampliaba el marcador por medio de Martí Amer, de cabeza en un saque de esquina. El partido ya estaba decidido. Diez minutos después, en el minuto 70 Joan Jordi, por dos veces seguidas, en un mano a mano ante Carlos, no consiguió batirle. Pero tres después Ramón, de tiro cruzado, superaba a Carlos, y el 4-0 llegaría ya en el tiempo de descuento en un contragolpe conducido por Mendoza, quien en jugada personal, llegó hasta el área, se revolvió y volvió a cruzar lejos del alcance de Carlos para redondear un marcador contundente.