Al Mercadal le tocó la cruz

Los objetivos de ambos equipos estaban bien definidos de antemano. Por parte del Mercadal una victoria valía prácticamente para proclamar virtualmente su tercera temporada de permanencia en la Tercera División. Mientras, los ibicencos querían ganar y de paso mirar de reojo a sus antecesores para ver si quedan a solo tres puntos del play off. Pero los dos no podían terminar contentos y ayer le tocó cara a la Peña Deportiva y cruz al Mercadal.

Pese a ello, el público se divirtió y terminó aplaudiendo a sus jugadores, porque el partido tuvo calidad, intensidad, decisiones polémicas en momentos cruciales, en fin, todo lo que hace atractivo a un partido de fútbol.

Los primeros compases ya dieron pistas sobre lo que iba a ser el choque. A dos llegadas con aire de peligro por parte de la Peña, contestó el local Berto con un tiro lejano, viendo adelantado a Moro, que tocó el larguero y salió fuera, pero en el minuto 19 David Mas perdió inesperadamente el balón, que fue aprovechado por Edu Moral para lanzar un trallazo inapelable que batió a Cristian.

El máximo goleador de Tercera mostraba sus galones (participó en todas las jugadas de peligro de su equipo) y poco después obligó a lucirse al meta del conjunto local que tenía en Lacueva a su hombre más enganchado en el partido.

Pero sería otro goleador, Mario Mora, quien cuando peor pintaba levantó el partido al conseguir el empate en un remate de bolea en el 35. Los visitantes protestaron el tanto por posible fuera de juego, pero, claro, no dijeron nada cuando en el 43 el árbitro anuló el que podía ser el segundo gol del Mercadal obra de Gaimundi al recoger un rechace de Moro a remate de Mora, un tanto que pareció legal y que rubricaba los mejores minutos del equipo de Yeray.

La segunda parte se evidenció mucho más táctica y prudente por ambos bandos. La Peña quería ganar, pero sobre todo no quería perder, así que su control no bastaba para provocar ocasiones de peligro, mientras el Mercadal mostraba orden y disciplina en todo el campo.

Todo cambió a partir del minuto 71, cuando Mario Mora (también como Moral, estuvo en todas) en lucha con Miguel Ángel ganó posición en el área y, a punto de rematar, el defensa le rebañó balón y pierna a la vez en una jugada que en muchísimas ocasiones se castiga con penalty. No lo consideró así Rodríguez Quintero, y continuó el juego que cuatro minutos después se inclinó del bando ibicenco con el 1-2 de Piquero.

A partir de aquí el Mercadal abandonó cualquier precaución, incluso Oscar se sumo a la delantera, y la Peña aprovechó entonces para provocar dos ocasiones de Moral y Ré que pudieron ser gol, y a la tercera Oski remató la faena con el 1-3 ya inalterable, premio a la efectividad sin duda, pero demasiado bagaje y castigo para unos y otros. Más de uno abandonó Sant Martí con la sensación de que el Mercadal mereció algo más.