El Alaior cayó ayer ante el Arenal víctima de dos errores defensivos que condicionaron el partido y que pueden tildarse de pura mala suerte. En el primer minuto Juanlu remató un balón en su propia portería y antes del cuarto de hora, otro rechace del Alaior sorprendía a Toni, que nada pudo hacer. Poco hizo a partir de ahí el Alaior, que sólo apretó al Arenal en el tramo final del partido, aunque se quedó sin tiempo para recortar las distancias.
El 1-0 en el primer minuto de juego sorprendió a propios y a extraños. Un centro de Andreu lo cabeceó sin querer a gol Juanlu, ante la mirada de Toni, que pareció pedirle explicaciones. Pero el vaso de agua fría se tornó jarro cuando en el minuto 14 una falta sacada por Servera tocaba en la barrera, descolocando a Toni, y significaba el 2-0.
A partir de ahí comenzó un partido bastante aburrido. En la primera parte el Arenal, mucho más necesitado que el Alaior, se limitó a jugar con el reloj a favor y tratando de contener a los alaiorenses. Por contra los hombres de Marc Serrano, que vio el partido desde la grada por sanción, no generaron ningún peligro, lo que les impidió recortar distancias antes del descanso.
La segunda parte arrancó con una tónica similar. Al Alaior le faltaba voracidad hacia la meta de Escoto y lo iba pagando a medida que se iba acercando el final.
Reaccionaron los albinegros a falta de 10 minutos y Jordi Perea tuvo la mejor ocasión para hacer el 2-1 pero Escoto solventó el uno contra uno y apagó la tímida reacción alaiorense, que se presentó en Son Garí con demasiadas bajas y que ayer despidió a su joven delantero Aitor, que se marcha al Somozas gallego.
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