Melià, Tomé y Calzada. Los jugadores del Alaior arrebatan un balón a un delantero de la Peña - Gemma Andreu

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El Alaior arrancó un meritorio empate ante el 'coco' Peña Deportiva Santa Eulàlia, recuperando la buena actitud que le había faltado la pasada semana en el campo del Penya Arrabal.

Mejor no podía empezar el encuentro para los intereses albinegros. Corría el primer minuto del envite y Calero se escapa por la banda. Su centro lo interceptaba con la mano un defensor pitiuso, y el correspondiente penalti lo lanzaba Juanlu engañando a Moro.
El Peña, en su primera llegada al marco defendido por Melià, avisó de sus intenciones: jugada personal de Edu Moral, y su disparo entre el meta local y el larguero evitaba el empate.

El partido, debido al tanto que consiguió el Alaior, era ameno, con ambos equipos enseñando sus cartas, pero con un ligero dominio por parte ibicenca. Pero poco a poco el juego perdió la chispa inicial, con los locales defendiéndose con orden y criterio, y dando algún susto a la zaga visitante.

A los 38 minutos, nueva llegada de los hombres de Luis Rueda en una jugada bien trenzada, y Yeste en el área de castigo no lograba finalizar. El dominio visitante iba creciendo, y los hombres de Marc Serrano cedían demasiado terreno para buscar alguna contra con la que matar el partido. En el último minuto del primer tiempo la Peña rozó el empate tras testarazo de Óscar, que la zaga albinegra despejó a córner. El Alaior aún tuvo tiempo para lograr el segundo en un contra, pero el chut de Juanlu fue repelido por el palo.
La Peña mantuvo la iniciativa en la reanudación sin crear demasiado peligro hasta que a los 58 minutos Edu Moral cabeceaba a la red una falta botada por Romero y establecía el empate.
Los ibicencos acentuaron su dominio y los de Serrano lo fiaban todo al contraataque. Aitor, lo intentó desde la frontal pero su disparo le salía flojo y desviado. En el 75, Aitor, tuvo el segundo en sus botas, pero Moro muy certero lo evitó. Y en una contra muy bien lleva por los pitiusos Raúl Gómez remató al larguero.

El partido ganaba en intensidad y era vistoso para el espectador, con ambos equipos alternándose en el dominio y las ocasiones. A falta de seis minutos para el final, el Peña rozó el segundo, tras un saque de esquina, que fue rematado por Pablo Ríos ligeramente desviado.

El encuentro no dio para más y se saldó con un empate que respondió a lo visto.