El Penya encamina la ruta del descenso tras un mal partido

El Penya Ciutadella perdió ayer una buena oportunidad para seguir enganchado a la esperanza de la permanencia en la División de Honor Juvenil (1 - 2). Los azulados de Tóbal Tudurí no pudieron imponerse al Hospitalet y a pesar de empatar en el minuto 86, el rival catalán sentenció en el '94 tras un acción extraña con error local.
Arrancó con acciones locales En un balón bombeado e inesperado, el meta David Moll sacó bajo los palos. El infortunio local apareció ya a los 20 minutos con la lesión de Mingorance, que tuvo que ser sustituido. Dos minutos después llegó el 0-1. Una salida de David topó con el defensa Álex, el balón quedó a los pies de Josele que bombeó al fondo de las red. Y el partido cuesta arriba.
Pesó el tanto catalán, pero mantuvo la embestida el cuadro de Tudurí. A los 26 minutos, Pereira tuvo el empate, pero su remate no tuvo consistencia y paró Sergi. Al linde de la media hora, Merca, dentro del área chica, cabeceó al travesaño. Fueron momentos de aprieto local cuando en el '34 Sales, de volea, en una buena posición, mandó alto.
Tras el descanso, cabía la esperanza de una remontada visto el tramo final de la primera parte del Penya. La reanudación llegó con dos acciones locales. En el '52 con una ocasión de Sales y en el '57 Merca no logró acertar portería al peinar un balón por alto. Poco después la réplica de Josele con un disparo alto.
El Hospitalet templó mejor su juego, se mostró más cómodo ante un Penya desajustado a medida que transcurría el choque. Más infortunio. Se retiró Merca en el '75 tras un fortuito golpe en la cabeza. Tras ser asistido en la banda, al final del partido fue evacuado en ambulancia a un centro médico. Tudurí había realizado los cuatro cambios y salió el meta suplente Enseñat como jugador de campo. El partido corría incierto en la hierba de Son Marçal y en el tramo final apretó el Penya y el público. A cuatro minutos de los 90, Bosch señala pena máxima por mano visitante dentro del área. Empató Enrich. Y de ahí al final, pasó de todo. El Hospitalet no se encerró y Kike lanzó una vaselina que se fue fuera por poco. El visitante pidió penalti en el '89. En el '91 se anula un gol al rival por fuera de juego y las protestas del banquillos valieron tres expulsiones directas, técnico incluido. En el '94 un balón en el área local acabó muerta para que Mousa pusiera el 1-2 y birlara los 3 puntos. Bastante decepción entre la parroquia de Ponent.